El encuentro entre Pedro Sánchez y Albert Rivera inspira comparaciones con la histórica pareja de entendimiento y consenso que conformaron Felipe González y Adolfo Suárez hace 40 años. Entre Sánchez y Rivera ha habido este jueves una clara sintonía. Pero también materia: lo mejor es que no han hablado de “sillones”, sino de “reformas”, ha dicho el líder de Cs. Rivera tiene escrito en su ADN político esos Pactos de La Moncloa que tanto ha estudiado: desde el 20D habla de mesa de negociación y de mesa técnica, dos términos claramente relacionado
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Todo lo que ha pasado desde las elecciones es un enorme despropósito porque está planteado en términos personalistas, en lugar de en términos funcionales. Llevamos mes y medio intentando encontrar la respuesta a la pregunta de quien gobierna, en lugar de para qué gobierna. Como echo de menos políticos que tengan un proyecto claro y lo defiendan, en lugar de defender posiciones partidistas, tácticas parlamentarias, y puestos en el gobierno. Ahí debería haber alguien que dijera "yo sostengo que lo que hay que hacer en España son estas cinco medidas: tal, tal, tal, tal y cual, y votaré a cualquiera que se comprometa a aplicarlas". Eso acabaría con toda la incertidumbre, el bloqueo, la perspectiva de nuevas elecciones, y centraría el debate en lo que de verdad le importa a la gente.
Pero no. Están todos encallados en el "quien", en el "con quien", y en el "con quien no, jamás".
Mucho hablan del "entendimiento" en la transición, pero ninguno de los 2 lo vivió. Las concesiones no fueron tan generosas, y muchas de ellas se plasmaron en futuros desarrollos y articulaciones que en 38 años no han llevado a cabo. Como muestra, la sucesión de la Corona, que finalmente hubo de precipitarse por la amenaza podemita...
Hasta en la Transición fueron más generosos y tuvieron más huevos al legalizar al partido comunista e incluirlo en esa mesa. Algo que no pasa ahora con podemos en esta segunda Transición.
De todas formas creo que el escollo principal en esta segunda Transición es la corrupción. Creo que no se puede dejar el gobierno a partidos que dicen estar en contra de la corrupción y ver que no hacen nada con los casos que tienen en sus partidos.