Hace 11 meses | Por Elnuberu a fanfan.es
Publicado hace 11 meses por Elnuberu a fanfan.es

Debo a Pablo, miembro de la Plataforma de personas afectadas por la abolición de la prostitución, promovida por el Psoe y aplaudida y secundada por el PP, el descubrimiento de la traducción de Julia de Castro de La retorica delle puttane ( La retórica de las putas) de Ferrante Pallavicino, eidtado por La Fábrica. El tomo se completa con unas reflexiones a modo de Peroración, de la propia Julia de Castro. En ese capítulo final enumera una serie de lecciones aprendidas en las conversaciones con dos prostitutas, una italiana y otra española.

Comentarios

D

#5 ...O la esclavitud... toda persona debería ser 'libre' de venderse como esclavo, y es raro que 'la industria' perviviese tanto sin ser 'sostenible'.

s

#7 Te vendes por dinero, básicamente lo mismo que hacemos todos en el trabajo.

D

#9 claro, y cazar negros para venderlos es libertad de mercado o mejor, "un efecto colateral indeseado".

Si te tienes que prostituir, o trabajar en una poza sacando mierda, no creo que sea por 'vocación', con la salvedad de que lo segundo posiblemente es beneficioso para la sociedad.

enriquequiron_

#7 Ha habido guerras por echar un casquete con la pareja de capricho y hay quien pasa por la vida sin intimar con nadie. Está claro que el comunismo del amor no funciona. La desigualdad es infinita.

anv

Yo no he usado nunca los servicios de una "profesional" de estas pero mi opinion es:
1) prohibición, persecución y endurecimiento de penas para quien las obligue a prostituirse. (cosa que debería extenderse a cualquier otro trabajo que se haga en condiciones de esclavitud moderna)
2) si alguien quiere trabajar proporcionando placer a otros, ya sea sexual o de cualquier otra forma, está en su derecho y debe tratarse como un trabajo normal.

jobar

#1 Muy bien, pero, no hay suficientes personas que quieren trabajar proporcionado placer sexual a otros, por lo que sea. Eso hace que la industria no sea sostenible sin tener que recurrir a secuestrar, amenazar y esclavizar a prostitutas, por lo que ambos problemas van juntos de manera inevitable.

anv

#2 Eso hace que la industria no sea sostenible sin tener que recurrir a secuestrar, amenazar y esclavizar a prostitutas, por lo que ambos problemas van juntos de manera inevitable.

Si no es sostenible entonces desaparecerá por sí misma sin necesidad de prohibirlo por la fuerza. Simplemente se persigue lo que sea ilegal y si después de eliminado no queda nadie, pues que así sea.

De todas formas del artículo se deduce que habrá pocas pero algunas hay.

jobar

#3 No puede desaparecer porque los proxenetas esclavista se defienden poniendo como escudo esas pocas que dicen que lo hacen de forma voluntaria, además de sobornando y corrompiendo a las autoridades.

anv

#4 No puedes recortar una libertad solamente porque haya delincuentes que obligan a gerente a realizarlo.

El delito NO es vender placer. El delito tiem que ser obligar a alguien a hacer algo que no quiere, ya sea prostituirse o trabajar horas extra sin cobrar.

enriquequiron_

#4 La gente entra en pánico moral cuando están en juego ciertos principios morales y es capaz de inventar la mayor conspiranoya de la historia con tal de no cuestionarse nada.

s

#2 Con ese mismo argumento prohibimos la inmigración, la tala de árboles o la pesca ...

jobar

#5 Ni por asomo, inmigrantes legales no faltan no hace falta esclavizar a nadie, tampoco esclavizan a nadie en España a los que talan o pescan ilegalmente.

s

#6 Hay noticias muy frecuentes de inmigrantes en régimen casi de exclavitud para pagar sus deudas, en todos los ámbitos laborales, en los barcos de pesca también

jobar

#8 Precisamente en el caso de la inmigración si los legalizaran se evitarían esos casos qué dices.

En cambio, legalizar la prostitución no va a conseguir que ninguna mujer quiera ser puta, y que no lo fuera antes.

enriquequiron_

#2 Ese argumento se lo inventó Amelia Tiganus. En todas las industrias con demanda ocurrirían los mismos abusos por esa regal de tres. Es absurdo, pero gracias a los miedos que los medios dibujan de la actividad, hay quien se lo cree.