El sector de las residencias de mayores está cada vez más controlado en España por un grupo de empresas privadas en manos de fondos de inversión y de multimillonarios españoles y franceses. También la Iglesia católica gestiona cientos de residencias. Las fundaciones y asociaciones no religiosas y las cooperativas tienen un papel muy limitado, con una única excepción: Gestión de Servicios Residenciales (GSR), una cooperativa del grupo vasco Mondragón que cuando comenzó la pandemia se encargaba de 19 geriátricos.
Comentarios
Las cooperativas de ancianos va a ser el futuro
Los ancianos son un target de los empresarios killers.
En román paladino: este país está lleno de HJDLGP, y no lo digo solo por los empresarios que explotan estos centros y a las personas que vivien en ellos, si no a las autoridades competentes en controlar que esta pasando allí.
Gracias señor Rico por no dejar caer en el olvido el tema de las muertes en las residencias . Yo ni olvido ni perdono .