El ADN de los restos de antiguos perros de América revela que estos canes no proceden de los lobos de la región, sino de antepasados siberianos que llegaron al continente hace 11.000 años y desaparecieron tras la llegada de los europeos. Su única herencia en las razas actuales es un cáncer genital canino.
Comentarios
Vaya titular...
Te extinguen y lo único que queda de ti es un cáncer de huevos.
Perra vida!
Normal, imagínate la cara del chiuaua la primera vez que vio a un mastín leones.
#4 Imagínate la cara de Cuautemoc Peres, sacerdote de la pirámide, cuando vio a un mastín leonés o un alano.
No te creas. Trump aún está ahí.