El ser humano es virtuoso en opinar y utilizar sus creencias para prestar consejo a un amigo, familiar o allegado. El ser humano suele opinar sobre situaciones que le importan o porque, de alguna manera, surge una identificación con la persona que está padeciendo el problema. El amor es uno de los asuntos favoritos a la hora de asesorar a otros. Por ejemplo, a aquella amiga que busca la estabilidad en su relación pero su pareja se muestra reiteradamente contraria al compromiso y, desde el interés por su bienestar emocional, suele ser...
Comentarios
Buaaahh, yo tengo una máster en saber dar consejos y ser absolutamente incapaz de aplicármelos...
#1 Yo te aconsejo que te apliques los consejos que das.
#4
El refranero es sabio y bien lo dice: Consejos vendo, para mí no tengo'
#6 O Haz lo que digo, no lo que hago
Porque un buen consejo jamás se perdona. Y hay que perdonarse a uno mismo y seguir viviendo.
Es que si la obligo es violación.
El que aconseja no paga.
¿Sabéis qué consejo es el que no soporto oir? Cuando alguien dice "No te tiene que importar lo que piensen los demás"
Siento que al identificarte con el problema de otra persona y tratar de aconsejarle, realmente lo que uno hace es aconsejarse a sí mismo, ya que en algún momento viviste esa situación y quisieras haberla solucionado de otra forma. Mi humilde opinión