Publicado hace 4 años por doctoragridulce a cinemania.20minutos.es

“¿Me dejarán tener el cochecito en la cárcel?” pervive como una de las frases finales más tremendas de la historia del cine español. Dicha con la voz quebrada de don Anselmo, el protagonista de El cochecito encarnado por Pepe Isbert, es el broche perfecto de la obra maestra que hicieron Marco Ferreri y Rafael Azcona en 1960, un par de años después de El pisito, cerrando la mejor dupla de comedias negrísimas sobre la posguerra española.

Comentarios

c

Ya se ha terminado el franquismo?

D

#1 Tú sigues allí, evidentemente.

D

#3 Yo nací poco después de que el franquismo muriera, así que nunca he estado allí. Tu seguramente naciste bastante después y estás oprimido por algo que vivió tu abuelo, no tú.

yopasabaporaqui

#9 Informarse y tener interés en la historia no es oprimirse.

Qué tiene de malo saber lo que vivió el abuelo?

D

#1 ¿Para 20 minutos? Jamás. Me imagino las conversaciones en el office de 20minutos, publico, eldiario... "Jo tia, es superfuerte, el franquismo no nos deja de oprimir", dicho por niñatas o imberbes de menos de 30 años que nacieron cuando Franco ya llevaba 15 años pudriéndose en su tumba.

yopasabaporaqui

#8 Ya te digo. Yo me imagino las de OKdiario y La Razón....

Condetino

Hola.-Muy buena pellicula, aprovechare esta revisión para verla otra vez

D

#5 Si lees 20minutos (o público o eldiario), es como vivir en 1960.

sillycon

#10 En cambio lees La Razón, OkDiario o el ABC y es como si nos hubieramos teletransprotado a un siglo XXXI utópico.

Bienvenido a MNM, manó.

Shotokax

#10 cuando veo a alguien en el Tribunal de Orden Público por hacer un chiste sobre Carrero Blanco no necesito mucho esfuerzo para trasladarme atrás en el tiempo.

Tontolculo

No será el cochecito de Carrero ¿no?

Shotokax

#2 cuidado con las bromas, que el Franquismo no ha terminado.

Hidromiel

Meterse en menéame es como viajar en el tiempo a una realidad espacio-temporal paralela.

D

Que se prepare, que la censura de ahora es mucho peor y sorpresa, viene de otro lado (insospechado para muchos). Que se cuide de los ofendiditos y demás mojigatos modernos.