En Japón, la policía retiene la propiedad perdida por tres meses, y si nadie reclama, el que lo ha encontrado puede reclamarlo. Incluso en los casos en que se encuentra al propietario, el que lo ha encontrado siempre puede reclamar de un 5% a un 20% como recompensa. Curiosamente, en la mayoría de los casos, las personas que encontraron la propiedad perdida decidieron donarla a la policía cuando no se identificó al legítimo propietario.
#1 Supongo que es tan simple como actuar como a uno le gustara que hicieran consigo mismo.
Es decir, si pierdes o te olvidas una cámara de fotos en un parque, te gustaría que apareciera. Pues, si te la encuentras y no es tuya, déjala donde estaba o llévala a alguna oficina de objetos perdidos. #2 La mala suerte de que, cuando pierdas o te olvides algo importante para ti, no aparezca nunca. Una especie de karma de los objetos perdidos.
#2 Creó recordar, que en Japón por cultura y superstición, los objetos mantienen digamos que el alma del primer poseedor y por eso las tiendas de segunda mano no cuajan, y socialmente esta mal visto quedarse con algo que no es tuyo.
#2 En Japón tienen la creencia que los objetos que te pertenecen tienen parte de tu alma (o esencia o algo similar). Por lo tanto, si te lo roban se quedan con esa parte de ti, por lo que les trae mala suerte y es una superstición.
Cuando estuve en Japón, podías dejarte la cartera y el móvil en la mesa de un restaurante, irte al baño dejándolos sin vigilancia y al volver allí seguían, ni los habían mirado.
Si si, lo llevan a la policía y si nadie lo reclama en una temporada se lo queda quien lo encontró. Así porqué voy a coger algo que no es mío ahora cuando puede que lo sea dentro de un tiempo.
Somos unos atrasados. Aquí podríamos hacer lo mismo, así podrían comprarse cañones de agua más grandes, equipamiento antidisturbios para golpear mejor y no se verían obligados a falsificar pruebas para ganar más dinero.
Comentarios
En Sevilla si te dejas un objeto de valor por ahí, el domingo siguiente puedes recuperarlo en el Charco de la Pava por un módico precio
Lo curioso es que no dudo que la policía declare íntegramente el dinero recibido y vaya a las arcas públicas, cosa que aquí tampoco ocurriría
En algún documental dijeron que en Japón (en general), si te dejas una cámara de fotos en un parque, por ejemplo, si vuelves, allí estará.
No sé si será a nivel generalizado.
#1 Me pareció oír que para los japoneses quedarse con un objeto que no les pertenece trae mala suerte
#1 Supongo que es tan simple como actuar como a uno le gustara que hicieran consigo mismo.
Es decir, si pierdes o te olvidas una cámara de fotos en un parque, te gustaría que apareciera. Pues, si te la encuentras y no es tuya, déjala donde estaba o llévala a alguna oficina de objetos perdidos.
#2 La mala suerte de que, cuando pierdas o te olvides algo importante para ti, no aparezca nunca. Una especie de karma de los objetos perdidos.
#2 #3 #7 #8
No lo sabía. Gracias.
#2 Creó recordar, que en Japón por cultura y superstición, los objetos mantienen digamos que el alma del primer poseedor y por eso las tiendas de segunda mano no cuajan, y socialmente esta mal visto quedarse con algo que no es tuyo.
#2 En Japón tienen la creencia que los objetos que te pertenecen tienen parte de tu alma (o esencia o algo similar). Por lo tanto, si te lo roban se quedan con esa parte de ti, por lo que les trae mala suerte y es una superstición.
Cuando estuve en Japón, podías dejarte la cartera y el móvil en la mesa de un restaurante, irte al baño dejándolos sin vigilancia y al volver allí seguían, ni los habían mirado.
Estamos a años luz.
#1 en mi pueblo desaparecería hasta un boli bic. de hecho duraría en el sitio lo que tardara alguien en verlo.
Si si, lo llevan a la policía y si nadie lo reclama en una temporada se lo queda quien lo encontró. Así porqué voy a coger algo que no es mío ahora cuando puede que lo sea dentro de un tiempo.
Somos unos atrasados. Aquí podríamos hacer lo mismo, así podrían comprarse cañones de agua más grandes, equipamiento antidisturbios para golpear mejor y no se verían obligados a falsificar pruebas para ganar más dinero.