Y es que durante más de 300 años fue el único lugar permitido en el que los judíos podían dar sepultura a sus seres queridos en la ciudad de Praga. Debido a la gran población judía que vivía en la ciudad de Praga, el cementerio pronto se quedó sin espacio y no se les permitió realizar labores de ampliación o crear un cementerio nuevo.
Comentarios
Cementerio N-Tier, para que lo entendáis mejor los informáticos muchos que pululan por aquí
Lo que nunca he entendido es que si se van añadiendo capas sucesivas de tierra se terminaría formando un cerro, no la forma plana que tiene.
Lo visité hace más de 20 años, no me importaría volver a verlo. Precioso.