Sorprende la extrañeza con la que Occidente ha reaccionado al descubrimiento del aparato de desinformación desplegado por la Rusia de Vladímir Putin para intervenir en política exterior. Y sorprende que le hayamos puesto un nombre nuevo, fake news, como si las noticias falsas fueran algo tan novedoso que necesitara bautizarse, cuando su uso es bastante conocido. De hecho, se han puesto antes en circulación, con mucha más parquedad de medios y la misma o mayor efectividad y discreción.
Comentarios
Claro,esto de la propaganda en Occidente nunca existió. Todo el mundo sabe que Goebbles era el ministro de corte y confección, Fraga ministro de queimadas y la asociación católica de propagandistas se dedicaba a la difusión del ajedrez, por poner tres ejemplos.
http://www.acdp.es/
Claro... Solo Rusia tiene aparato y al resto de potencias les pilla por sorpresa.
El so mugroso!! te meto así!! como a los conejos!
Siempre ha habido noticias falsas, bulos, mentiras, estafas... Lo que pasa es que (en general) la prensa generalista ha perdido mucho prestigio, la gente ha empezado a tirar de redes sociales, blogs, giros y demás. La cultura de la inmediatez está ganando. Para defenderse, atacan a las redes sociales como fábrica de noticias falsas, cuando la pérdida de prestigio era anterior. Pero es mejor buscar el enemigo fuera.
Ejemplar artículo de como cargar el muerto al enemigo y ser yupiprogue.
Hemos sido testigos como
cuando a través de las redes las denuncias de la gente se abrieron paso, la clase de los propietarios, se invento el cuento de las fakes news, que siempre fueron las suyas, para tumbar la nueva línea de información que los desnudaba.