Desde finales del siglo XIX, con la monarquía borbónica de Alfonso XII, pasando por el franquismo, todos los regímenes españoles han mostrado en algún momento voluntad aparente de comprender Cataluña El resultado siempre ha sido decepcionante, desde que el Estado rechazó hace más de cien años la reclamación del concierto económico
#3:
Eso de utilizar de "comprender a Cataluña" como si un teritorio como si tuviera "voluntad" es de lo más rancio y lo más Helderiano ( Helder) Los nacionalistas. no han pasado de la lectura de los identitarios alemanes del siglo XIX.
#5:
Resulta curioso que todos los "profundos sentimientos identitarios" siempre se resumen en "pasta para nosotros los buenos que nos la quitáis los fachas malos". Y patético que algún partido que se dice "de izquierdas" defienda esa desigualdad social a la que aspiran los ricos.
En 1923, la Liga -que tenía detrás el grueso de la burguesía más dinámica- estaba decepcionada con el régimen de la Restauración. Y se dejó conquistar por la palabra ensabonadora del capitán general Miguel Primo de Rivera, que se hizo amigo de Josep Puig i Cadafalch, el presidente de la Mancomunidad. Como antes con Polavieja, la derecha catalanista estaba dispuesta a seguir un militar que mostraba filoregionalisme. El capitán general de Cataluña aseguró el dirigente catalanista que si llegaba a gobernar haría una política descentralizadora. Hizo alguna declaración de simpatía por la lengua catalana, aunque no consta que dijera que hablaba en catalán en la intimidad.
Josep Puig i Cadafalch, uno de los que confió en Primo de rivera Foto: Ramon Casas (MNAC)
Barcelona y las principales ciudades vivían un clima de violencia y pistolerismo entre los grupos cenetistas y pistoleros a sueldo de la patronal. El golpe de estado de Primo de Rivera de septiembre de 1923 fue visto con esperanzas en sectores de la Liga. El resultado fue de nuevo decepcionante. Mientras se instauraba una dictadura y la CNT era reducida al silencio, Primo de Rivera olvidó las promesas. Pocos días después de llegar al poder ya emitió un decreto de represión del "separatismo". Muy pronto, la Mancomunidad comenzó a tener problemas y se instauró una política de españolización en todos los campos, incluida la prohibición de los Juegos Florales.
1960: "Operación Cataluña"
En mayo de 1960, el régimen franquista diseñó una estrategia de acercamiento a Cataluña. Los años cincuenta se habían evidenciado los primeros brotes de una oposición que, con muchos esfuerzos, se iba reconstruyendo. Hay que recordar el éxito de la huelga de tranvías de 1951, la segunda huelga que se produjo en 1957, la campaña del grupo CC, donde militaba un joven Jordi Pujol, para protestar contra la corrupción y el encarecimiento de la vida ( con pintadas con la P de protesta por diversos lugares) y, especialmente, el caso Galinsoga, en 1959, que alarmó al régimen. La protesta ciudadana contra el director de La Vanguardia, Luis Martínez de Galinsoga, hombre de ideas ultraderechistas que llamó "¡Todos los catalanas son una mierda!" En una iglesia al ver que se hacía misa en catalán, se extendió. Se llegaron a quemar ejemplares del diario de Godó y muchos suscriptores se dieron de baja. Finalmente, el director fue cesado.
El entonces alcalde de Barcelona, Josep Maria de Porcioles, fue uno de los estrategas de la Operación Cataluña. Notario de profesión, militante de la Liga en su juventud, Porcioles consiguió que las Cortes franquistas aprobaran la Compilación del derecho civil catalán, un reconocimiento a la especificidad jurídica catalana. El retorno del castillo de Montjuïc en la ciudad y la concesión a Barcelona de una Carta municipal permitió hablar de tres C (Compilación, Castillo y carta).
En el marco de esta operación de Estado, Franco visitó Cataluña en mayo de 1960. Estuvo todo el mes, alojándose en el Palau de Pedralbes y manteniendo contactos con la "sociedad civil". Incluso presidió un consejo de ministros. En este caso, sin embargo, no hubo que esperar mucho tiempo para comprobar final son llegaba la política de gestos del régimen con Cataluña.
El 19 de mayo, el Orfeón Catalán conmemoró el Palau de la Música los cien años del nacimiento de Joan Maragall. Franco tenía previsto asistir, pero finalmente no lo hizo. En el programa musical se prohibió que se incluyera el Canto de la bandera. Durante el concierto, un grupo de asistentes lo hizo, en presencia de varios ministros, y la policía intervino. A raíz de estos hechos se detuvo Jordi Pujol y otros activistas, como Francesc Pizón y Jaume Casajoana. Pujol fue sometido a consejo de guerra y condenado a siete años de prisión. Pizón, a tres años.
La historia de las diversas "operaciones Diálogo" puestas en marcha por los gobiernos españoles no da mucho margen al optimismo. Desde la transición, la estrategia del pájaro en mano logró concesiones siempre que el Gobierno de turno necesitaba apoyos en el Congreso (caso del pacto del Majestic).
Los grandes reconocimientos de soberanía fruto de un acuerdo Estado-Cataluña siempre se han producido en momentos de cambio de régimen. Porque Cataluña recuperara soberanía política, los años treinta, con el Estatuto de Nuria, tuvo que caer la monarquía borbónica y proclamarse la Segunda República. Y el retorno de la Generalitat en 1977 fue factible cuando el cadáver de Franco ya era frío.
#9:
#2 Me ha hecho mucha gracia como omite los intereses de inversores catalanes en Cuba y Filipinas.
Leyendo el artículo pareciera que Cataluña (Una, con una voluntad homogénea y con interéses únicos) está ahí a lo suyo y llega España, que es opresora, cateta y mentirosa y no para de hacerle faenas a la pobre Catalina..
Y lo de pintar a Pujol como un activista... En fin.
#1:
traducción:
La "operación diálogo" puesta en marcha por el gobierno español ante el proceso catalán no ha sido la primera de las que ha hecho el Estado para intentar responder a las reivindicaciones de Cataluña. Desde la eclosión del catalanismo político moderno, a finales del siglo XIX, muchas han sido las operaciones llevadas a cabo por ejecutivos de signo político. Casi todas -con alguna excepción remarcable- han acabado igual: con el gobierno español incumpliendo sus compromisos y ganando tiempo.
1899: el concierto económico, compromiso olvidado
Desde el primer Congreso Catalanista, en 1880, y el Memorial de Agravios presentado al rey Alfonso XII, se fue consolidando el catalanismo moderno. En el Mensaje a la reina regente de 1888, de tono conservador, un texto en el que Ángel Guimerà intervino directamente, se reclamaba la oficialidad del catalán, la soberanía catalana en los tribunales de justicia y que los catalanes pudieran elegir a sus gobernantes .
La presión catalanista fue creciendo, mientras perdían fuerza los partidos del régimen monárquico. Pero fue la crisis de 1898, con la pérdida de las últimas colonias, lo que hizo tambalear el Estado español, humillado en una guerra delirante con Estados Unidos. La burguesía catalana se fue separando del régimen y el catalanismo se convirtió en Barcelona una fuerza emergente.
El llamado Desastre del 98 hizo caer el gobierno y se formó un ministerio presidido por el conservador Silvela y que tenía como número dos y ministro de la guerra el general Camilo García de Polavieja, un militar que había sido gobernador de Cuba y Filipinas y conocido por su represión. Tenía ambiciones políticas y discurso aparentemente renovador contra la clase política. Con una especie de populismo de derechas se hizo popular entre sectores regionalistas catalanes, que decía defender.
Lo cierto es que Silvela formó un gobierno que quería atraerse Cataluña. El ministro catalán fue el jurista Duran y Bas, en Justicia. Se prometió regular las incompatibilidades de diputados y senadores, reducir efectivos militares y diplomáticos, y descentralizar los servicios de obras públicas. Juan Sallarès, hombre de Fomento del Trabajo y admirador de Polavieja, consiguió que Silvela se comprometiera al concierto económico y una diputación única.
El nuevo gobierno "amigo" hizo algunos gestos, como nombrar algunos alcaldes catalanistas, como el doctor Robert en Barcelona, y algunos obispos regionalistas como Torras y Bages en Vic. Entonces las designaciones episcopales estaban en manos del gobierno. Pero muy pronto surgieron los problemas. Con una hacienda que había quedado herida de muerte por la pérdida de Cuba y Filipinas, los presupuestos incluyeron fuertes cargas fiscales que molestaron industriales y comerciantes catalanes, y que fueron el origen del cierre de cajas, la revuelta fiscal que supuso una ola de represión en Catalunfolya: estado de guerra y detenciones de tenderos. Pero del concierto económico, nada de nada. Silvela negó que se hubiera comprometido. Duran y Bas y Polavieja salieron del gobierno.
1918: Alfonso XIII enreda Cambó o Cambó se deja enredar
El catalanismo se convirtió en el bloque central de la política catalana. En 1913, tras años de reivindicación, el Estado hizo una gran concesión: acordó la Mancomunidad. Fue la conquista más relevante del catalanismo, gracias al genio político de Prat de la Riba y la complicidad que encontró en el gobernante José Canalejas, un españolista inteligente. Pero el Estado hacía aguas por todas partes. El movimiento de la Asamblea de Parlamentarios del 1917, que unió el catalanismo y fuerzas democráticas del Estado como los republicanos, asustó Madrid, sobre todo cuando se extendió la protesta obrera ante la crisis de subsistencias. Asustado otra vez, el Estado cede. Se forman gobiernos de concentración con presencia catalanista de la Liga.
Francesc Cambó, el líder de la Liga a la muerte de Prat, cuenta en sus memorias una entrevista que tuvo el 15 de noviembre de 1918 con Alfonso XIII. El monarca estaba aterrizado. La guerra europea había terminado y la revolución se extendía por el continente: Rusia, Alemania ... El Borbón mostró al líder catalanista su simpatía por la causa autonomista y hasta el alentó a reclamar poder político. Poco después, se lanzó la Campaña para la Autonomía, que fue rechazada de plano por el gobierno.
Cambó fue ministro dos veces, de Fomento en 1918 y de Hacienda entre 1921 y 1922, y se sintió seducido. En algún momento, pareció que el Estado podía cambiar. Pero la realidad volvería a manifestarse de la manera más cruda: un ministro catalán, por listo que fuera, y Cambó lo era, quedaba engullido dentro del aparato del Estado, que seguía en manos de los sectores oligárquicos castellanos. La clase dirigente española sólo quería ganar tiempo.
Puig i Cadafalch confía en Primo de Rivera
En 1923, la Liga -que tenía detrás el grueso de la burguesía más dinámica- estaba decepcionada con el régimen de la Restauración. Y se dejó conquistar por la palabra ensabonadora del capital
Eso de utilizar de "comprender a Cataluña" como si un teritorio como si tuviera "voluntad" es de lo más rancio y lo más Helderiano ( Helder) Los nacionalistas. no han pasado de la lectura de los identitarios alemanes del siglo XIX.
#3 Creer que la expresión "comprender catalunya" es comprender piedras y árboles es un problema grave tuyo de comprensión del lenguaje humano, ¿no te imaginas lo que significa?
#6 el lenguaje traiciona mon cher ami. Se nota que tu eres un identitario de los que no conocen a sus teóricos. Si te interesa te paso un lista de referentes
#16 Seré muchas cosas terribles pero soy capaz de entender a qué se refiere alguien cuando dice "comprender a Catalunya". Si te falla la capacidad para extraer el significado de algo tan simple todo tu discurso queda invalidado, estimado.
Resulta curioso que todos los "profundos sentimientos identitarios" siempre se resumen en "pasta para nosotros los buenos que nos la quitáis los fachas malos". Y patético que algún partido que se dice "de izquierdas" defienda esa desigualdad social a la que aspiran los ricos.
Ok, se lo diré al primero que me llore por recortes o peajes ,¿para qué quereis a catalanes en españa? si tan poco os importa el dinero no habría problema para el pacto fiscal...
Mi vecino pobre dice que quiere un Mercedes como el mío porque el Ibiza se le queda corto, ¿qué le digo? Yo le digo que curro y que de joven estudié.
#12 Me dicen los gallegos y los de Noroeste en general que el expolio energético es incalculable y una vergüenza y que van a exigir una tasa a Iberdrola y a GNF.
Han destrozado su paisaje y los puestos de trabajo se han centralizado en Barcelona y Bilbao.
Van a votar un Estatuto para revertir todo eso PORQUE ES LA VOLUNTAD DEL PUEBLO Y YA ESTÁ BIEN DE QUE LES ROBEN LOS QUE ADEMAS LES DESPRECIAN..BLA BLA perdón, se me ha encendido el piloto memonacionalista y ya ni datos ni argumentos ni hostias.
#11 ¿Según qué criterio de balanzas fiscales son 18.500m€?
El mío que se niegan a pactar un pacto fiscal y maquean los datos. Son trileros.
Es curioso que no habla de:
-Las dos Exposiciones Internacionales/Universales
¿Sevilla o Zaragoza? Pero gracias por recordar que para que Catalunya reciba inversiones de estado necesita montar eventos internacionales. Por eso Clos después de los jjoo se inventó eso del Fórum 2004, si lo decían abiertamente! España solo cumple con Catalunya cuando tiene miedo a hacer un ridiculo internacional.
-El seguro de cambio de las autopistas y otras inversiones en infraestructuras en Cataluña
Claro, claro, tener el 70% de las autopistas con peaje es un privilegio . Por no hablar del desastre de Cercanías que han presupuestado resolver varias veces y nunca han hecho ni harán.
Eiiiiii, pero 5000 millones para radiales de Madrid sí que hay y ya van por 14 autopistas de acceso compitiendo con Singapur por el liderazgo.
Si a pesar de la discriminación y el puteo constante de tener un estado en contra la economía catalana sigue funcionando tiene mucho mérito , ¿serán las dificultades lo que nos hace avanzar?
#30 Si yo soy el primero que se beneficiaría de un pacto fiscal para dejar de pagar AVE y autopistas en Andalucía, Castilla y Extremadura. Cupo vasco para todos y ya verás que risa en 10 años.
Explica que el sobrecoste de 400m a 2.200m se debe sobre todo a que varios jueces acabaron considerando todo el interior de la M-50 como urbanizable y por tanto se pagaron parcelas agrícolas precio de suelo urbano... Luego está la gran idea de obligar a construir la M-50 "gratis" a las constructoras de las radiales, lo que les ha posibilitado ahora jugar con la baza de cerrar tramos de la M-50.
Por cierto, el otro día fui de Barcelona a Sant Cugat por los túneles y 15€ i/v al día en hora punta. Una estafa. Pero bueno, yo confío en que con la independencia en 18 meses se acabarán los peajes, la L9, Rodalies a la T-Sud y Abiertis será nacionalizada (valga la redundancia).
#31 Si yo soy el primero que se beneficiaría de un pacto fiscal para dejar de pagar AVE y autopistas en Andalucía, Castilla y Extremadura. Cupo vasco para todos y ya verás que risa en 10 años.
Claro, porque se ve que lo justo es que las autopistas en Catalunya las paguen los catalanes cada vez que pasan con su coche porque son gente rica. Será eso. A los madrileños desde que se independizaron de Castilla la pobre no les ha ido nada mal
. Por cierto, el otro día fui de Barcelona a Sant Cugat por los túneles y 15€ i/v al día en hora punta. Una estafa
Por 0 euros podrias haber entrado y salir de Madrid por siete autopistas del estado españl siete veces: privilegios del cenrralismo y de ser ciudadanos de primera. Ahora cuéntame que las víctimas son los responsables. Dinero publico español para rescatar esos peajes y que el ciudadano no pague no hay pero para el chanchullo de las radiales sí.
¿Pero no querías la independencia para pagar todo eso con 16.000 millones anuales? Las autopistas de la Comunidad de Madrid (túneles de la M-30, M-45, M-501, M-503) y el Metro lo pagan los madrileños y por cierto el Metro Ligero y las M-45 y similares de la época Aguirre son una estafa a los ciudadanos del calibre Abertis,
En Barcelona si se acabara la L9 se solucionaría mucho, pero ya sabemos como está el tema, pagando concesiones por estaciones cerradas.
Las radiales no están sólo en Madrid, la R-2, R-3, R-4 y R-5 sí lo están (y el Eje Aeropuerto), también está la circunvalación de Alicante, la Cartagena-Vera y la AP-46.
#35 7 accesos (A1, A2, A3, A4, A42, A5, A6) y 2 circunvalaciones (la M30 ya es municipal).
¿Tienes el mapa equivalente de Barcelona? Aparte de los peajes, ¿qué se puede construir?
Es un tema que me interesa y he visto el estudio del Cercle Catalá bastante bien documentado.Según eso, en 2017-2021 se podrían liberar los peajes de la AP-2 y la AP-7
#37 Esto ya lo se ha posteado tanto que es cansino. Barcelona debería tener las autopistas de ACESA libres de peaje desde los 90.
Josep Borrell llevó a Bruselas la compra de Acesa/Abertis y el incumplimiento de las condiciones de la concesión. Todo esto con la aquiescencia -sino la colaboración activa de LaCaixa-CiU- que se las han arreglado para que una concesión perfectamente amortizada a 25 años siga funcionando 45 años después.
Las leyes franquistas de 1967 curiosamente impedían este expolio del pueblo catalán, sufragado por todos los españoles (seguros de cambio) que sólo ha sido posible gracias precisamente a la gestión de CiU y el Molt Honorable:
No verás ninguna denuncia de Abertis o CiU o LaCaixa por difamación; esto lleva en conocimiento del público desde 1990 o antes y no es que la base de votantes de CiU les castigará mucho.
#8Deberías recordar porque empezó todo esto en 2010... y verás que no fue por dinero.
No, por supuesto fue en 2010 y por que había armas de destrucción masiva ni por dinero ni por poder
Igual que la primera guerra mundial fué por la muerte del archiduque y no por que nadie tuviera ganas de ampliar sus fronteras
traducción:
La "operación diálogo" puesta en marcha por el gobierno español ante el proceso catalán no ha sido la primera de las que ha hecho el Estado para intentar responder a las reivindicaciones de Cataluña. Desde la eclosión del catalanismo político moderno, a finales del siglo XIX, muchas han sido las operaciones llevadas a cabo por ejecutivos de signo político. Casi todas -con alguna excepción remarcable- han acabado igual: con el gobierno español incumpliendo sus compromisos y ganando tiempo.
1899: el concierto económico, compromiso olvidado
Desde el primer Congreso Catalanista, en 1880, y el Memorial de Agravios presentado al rey Alfonso XII, se fue consolidando el catalanismo moderno. En el Mensaje a la reina regente de 1888, de tono conservador, un texto en el que Ángel Guimerà intervino directamente, se reclamaba la oficialidad del catalán, la soberanía catalana en los tribunales de justicia y que los catalanes pudieran elegir a sus gobernantes .
La presión catalanista fue creciendo, mientras perdían fuerza los partidos del régimen monárquico. Pero fue la crisis de 1898, con la pérdida de las últimas colonias, lo que hizo tambalear el Estado español, humillado en una guerra delirante con Estados Unidos. La burguesía catalana se fue separando del régimen y el catalanismo se convirtió en Barcelona una fuerza emergente.
El llamado Desastre del 98 hizo caer el gobierno y se formó un ministerio presidido por el conservador Silvela y que tenía como número dos y ministro de la guerra el general Camilo García de Polavieja, un militar que había sido gobernador de Cuba y Filipinas y conocido por su represión. Tenía ambiciones políticas y discurso aparentemente renovador contra la clase política. Con una especie de populismo de derechas se hizo popular entre sectores regionalistas catalanes, que decía defender.
Lo cierto es que Silvela formó un gobierno que quería atraerse Cataluña. El ministro catalán fue el jurista Duran y Bas, en Justicia. Se prometió regular las incompatibilidades de diputados y senadores, reducir efectivos militares y diplomáticos, y descentralizar los servicios de obras públicas. Juan Sallarès, hombre de Fomento del Trabajo y admirador de Polavieja, consiguió que Silvela se comprometiera al concierto económico y una diputación única.
El nuevo gobierno "amigo" hizo algunos gestos, como nombrar algunos alcaldes catalanistas, como el doctor Robert en Barcelona, y algunos obispos regionalistas como Torras y Bages en Vic. Entonces las designaciones episcopales estaban en manos del gobierno. Pero muy pronto surgieron los problemas. Con una hacienda que había quedado herida de muerte por la pérdida de Cuba y Filipinas, los presupuestos incluyeron fuertes cargas fiscales que molestaron industriales y comerciantes catalanes, y que fueron el origen del cierre de cajas, la revuelta fiscal que supuso una ola de represión en Catalunfolya: estado de guerra y detenciones de tenderos. Pero del concierto económico, nada de nada. Silvela negó que se hubiera comprometido. Duran y Bas y Polavieja salieron del gobierno.
1918: Alfonso XIII enreda Cambó o Cambó se deja enredar
El catalanismo se convirtió en el bloque central de la política catalana. En 1913, tras años de reivindicación, el Estado hizo una gran concesión: acordó la Mancomunidad. Fue la conquista más relevante del catalanismo, gracias al genio político de Prat de la Riba y la complicidad que encontró en el gobernante José Canalejas, un españolista inteligente. Pero el Estado hacía aguas por todas partes. El movimiento de la Asamblea de Parlamentarios del 1917, que unió el catalanismo y fuerzas democráticas del Estado como los republicanos, asustó Madrid, sobre todo cuando se extendió la protesta obrera ante la crisis de subsistencias. Asustado otra vez, el Estado cede. Se forman gobiernos de concentración con presencia catalanista de la Liga.
Francesc Cambó, el líder de la Liga a la muerte de Prat, cuenta en sus memorias una entrevista que tuvo el 15 de noviembre de 1918 con Alfonso XIII. El monarca estaba aterrizado. La guerra europea había terminado y la revolución se extendía por el continente: Rusia, Alemania ... El Borbón mostró al líder catalanista su simpatía por la causa autonomista y hasta el alentó a reclamar poder político. Poco después, se lanzó la Campaña para la Autonomía, que fue rechazada de plano por el gobierno.
Cambó fue ministro dos veces, de Fomento en 1918 y de Hacienda entre 1921 y 1922, y se sintió seducido. En algún momento, pareció que el Estado podía cambiar. Pero la realidad volvería a manifestarse de la manera más cruda: un ministro catalán, por listo que fuera, y Cambó lo era, quedaba engullido dentro del aparato del Estado, que seguía en manos de los sectores oligárquicos castellanos. La clase dirigente española sólo quería ganar tiempo.
Puig i Cadafalch confía en Primo de Rivera
En 1923, la Liga -que tenía detrás el grueso de la burguesía más dinámica- estaba decepcionada con el régimen de la Restauración. Y se dejó conquistar por la palabra ensabonadora del capital
En 1923, la Liga -que tenía detrás el grueso de la burguesía más dinámica- estaba decepcionada con el régimen de la Restauración. Y se dejó conquistar por la palabra ensabonadora del capitán general Miguel Primo de Rivera, que se hizo amigo de Josep Puig i Cadafalch, el presidente de la Mancomunidad. Como antes con Polavieja, la derecha catalanista estaba dispuesta a seguir un militar que mostraba filoregionalisme. El capitán general de Cataluña aseguró el dirigente catalanista que si llegaba a gobernar haría una política descentralizadora. Hizo alguna declaración de simpatía por la lengua catalana, aunque no consta que dijera que hablaba en catalán en la intimidad.
Josep Puig i Cadafalch, uno de los que confió en Primo de rivera Foto: Ramon Casas (MNAC)
Barcelona y las principales ciudades vivían un clima de violencia y pistolerismo entre los grupos cenetistas y pistoleros a sueldo de la patronal. El golpe de estado de Primo de Rivera de septiembre de 1923 fue visto con esperanzas en sectores de la Liga. El resultado fue de nuevo decepcionante. Mientras se instauraba una dictadura y la CNT era reducida al silencio, Primo de Rivera olvidó las promesas. Pocos días después de llegar al poder ya emitió un decreto de represión del "separatismo". Muy pronto, la Mancomunidad comenzó a tener problemas y se instauró una política de españolización en todos los campos, incluida la prohibición de los Juegos Florales.
1960: "Operación Cataluña"
En mayo de 1960, el régimen franquista diseñó una estrategia de acercamiento a Cataluña. Los años cincuenta se habían evidenciado los primeros brotes de una oposición que, con muchos esfuerzos, se iba reconstruyendo. Hay que recordar el éxito de la huelga de tranvías de 1951, la segunda huelga que se produjo en 1957, la campaña del grupo CC, donde militaba un joven Jordi Pujol, para protestar contra la corrupción y el encarecimiento de la vida ( con pintadas con la P de protesta por diversos lugares) y, especialmente, el caso Galinsoga, en 1959, que alarmó al régimen. La protesta ciudadana contra el director de La Vanguardia, Luis Martínez de Galinsoga, hombre de ideas ultraderechistas que llamó "¡Todos los catalanas son una mierda!" En una iglesia al ver que se hacía misa en catalán, se extendió. Se llegaron a quemar ejemplares del diario de Godó y muchos suscriptores se dieron de baja. Finalmente, el director fue cesado.
El entonces alcalde de Barcelona, Josep Maria de Porcioles, fue uno de los estrategas de la Operación Cataluña. Notario de profesión, militante de la Liga en su juventud, Porcioles consiguió que las Cortes franquistas aprobaran la Compilación del derecho civil catalán, un reconocimiento a la especificidad jurídica catalana. El retorno del castillo de Montjuïc en la ciudad y la concesión a Barcelona de una Carta municipal permitió hablar de tres C (Compilación, Castillo y carta).
En el marco de esta operación de Estado, Franco visitó Cataluña en mayo de 1960. Estuvo todo el mes, alojándose en el Palau de Pedralbes y manteniendo contactos con la "sociedad civil". Incluso presidió un consejo de ministros. En este caso, sin embargo, no hubo que esperar mucho tiempo para comprobar final son llegaba la política de gestos del régimen con Cataluña.
El 19 de mayo, el Orfeón Catalán conmemoró el Palau de la Música los cien años del nacimiento de Joan Maragall. Franco tenía previsto asistir, pero finalmente no lo hizo. En el programa musical se prohibió que se incluyera el Canto de la bandera. Durante el concierto, un grupo de asistentes lo hizo, en presencia de varios ministros, y la policía intervino. A raíz de estos hechos se detuvo Jordi Pujol y otros activistas, como Francesc Pizón y Jaume Casajoana. Pujol fue sometido a consejo de guerra y condenado a siete años de prisión. Pizón, a tres años.
La historia de las diversas "operaciones Diálogo" puestas en marcha por los gobiernos españoles no da mucho margen al optimismo. Desde la transición, la estrategia del pájaro en mano logró concesiones siempre que el Gobierno de turno necesitaba apoyos en el Congreso (caso del pacto del Majestic).
Los grandes reconocimientos de soberanía fruto de un acuerdo Estado-Cataluña siempre se han producido en momentos de cambio de régimen. Porque Cataluña recuperara soberanía política, los años treinta, con el Estatuto de Nuria, tuvo que caer la monarquía borbónica y proclamarse la Segunda República. Y el retorno de la Generalitat en 1977 fue factible cuando el cadáver de Franco ya era frío.
#2 Me ha hecho mucha gracia como omite los intereses de inversores catalanes en Cuba y Filipinas.
Leyendo el artículo pareciera que Cataluña (Una, con una voluntad homogénea y con interéses únicos) está ahí a lo suyo y llega España, que es opresora, cateta y mentirosa y no para de hacerle faenas a la pobre Catalina..
Y lo de pintar a Pujol como un activista... En fin.
#23 no es victimismo, es realismo
exposiciones universales hahahah no me hagas reir
autopistas de peaje pagadas millones de veces hahahaha no me hagas reir
Tantos viajecitos de la dialogadora vicepresidenta para aquí y para allá y al final se hace la foto con los cuatro mataos de su partido y se vuelve a la capital del reino empapada de dialogo.
#15 Es correcto. No han cumplido lo pactado ni ua sola vez.
Cuando se pactó la cesión de un impuesto, crearon un nuevo impuesto que lo sustituía.
Cuando se pactaron presupuestos, los presupuestos no se ejecutaron.
etc.
La conclusión es que no se está hablando con personas honestas, y por lo tanto es necesario hacer otra cosa distinta de hablar.
Comentarios
Eso de utilizar de "comprender a Cataluña" como si un teritorio como si tuviera "voluntad" es de lo más rancio y lo más Helderiano ( Helder) Los nacionalistas. no han pasado de la lectura de los identitarios alemanes del siglo XIX.
#3 Cuales,los del referéndum o los de la Constitución?
#3 Creer que la expresión "comprender catalunya" es comprender piedras y árboles es un problema grave tuyo de comprensión del lenguaje humano, ¿no te imaginas lo que significa?
#6 el lenguaje traiciona mon cher ami. Se nota que tu eres un identitario de los que no conocen a sus teóricos. Si te interesa te paso un lista de referentes
#16 Seré muchas cosas terribles pero soy capaz de entender a qué se refiere alguien cuando dice "comprender a Catalunya". Si te falla la capacidad para extraer el significado de algo tan simple todo tu discurso queda invalidado, estimado.
#3 Totalmente de acuerdo con lo que demuestras.
Resulta curioso que todos los "profundos sentimientos identitarios" siempre se resumen en "pasta para nosotros los buenos que nos la quitáis los fachas malos". Y patético que algún partido que se dice "de izquierdas" defienda esa desigualdad social a la que aspiran los ricos.
#5 ¿los catalanes somos ricos?
Ok, se lo diré al primero que me llore por recortes o peajes ,¿para qué quereis a catalanes en españa? si tan poco os importa el dinero no habría problema para el pacto fiscal...
Mi vecino pobre dice que quiere un Mercedes como el mío porque el Ibiza se le queda corto, ¿qué le digo? Yo le digo que curro y que de joven estudié.
#5 el caso deque, objetivamente, nos quitan 18.500 millones anuales, no disminuye los sentimientos identitarios...
Deberías recordar porque empezó todo esto en 2010... y verás que no fue por dinero.
#8 ¿No eran sólo 16.000 millones anuales?
¿Según qué criterio de balanzas fiscales son 18.500m€?
#11 Es imposible calcular el alcance del expolio, posiblemente sea mucho mas abultado.
#12 Es imposible calcular el alcance del expolio, porque no existe.
#13 Bueno, pués no, si tu lo dices...
#14 Existe si llamas expolio a pagar impuestos, siguiendo la estela de grandes catalanistas como Cristiano Ronaldo.
#18 Es el reparto de las inversiones, no el cobro de impuestos.
#13 Sí, claro, y el referendum no se puede celebrar porque nos quereis mucho.
#12 Me dicen los gallegos y los de Noroeste en general que el expolio energético es incalculable y una vergüenza y que van a exigir una tasa a Iberdrola y a GNF.
Han destrozado su paisaje y los puestos de trabajo se han centralizado en Barcelona y Bilbao.
Van a votar un Estatuto para revertir todo eso PORQUE ES LA VOLUNTAD DEL PUEBLO Y YA ESTÁ BIEN DE QUE LES ROBEN LOS QUE ADEMAS LES DESPRECIAN..BLA BLA perdón, se me ha encendido el piloto memonacionalista y ya ni datos ni argumentos ni hostias.
#11 Son cifras maquilladas. Hay numerosos trucos contables en los datos españoles. Yo creo que andará por el doble de eso.
#11 ¿Según qué criterio de balanzas fiscales son 18.500m€?
El mío que se niegan a pactar un pacto fiscal y maquean los datos. Son trileros.
Es curioso que no habla de:
-Las dos Exposiciones Internacionales/Universales
¿Sevilla o Zaragoza? Pero gracias por recordar que para que Catalunya reciba inversiones de estado necesita montar eventos internacionales. Por eso Clos después de los jjoo se inventó eso del Fórum 2004, si lo decían abiertamente! España solo cumple con Catalunya cuando tiene miedo a hacer un ridiculo internacional.
-El seguro de cambio de las autopistas y otras inversiones en infraestructuras en Cataluña
Claro, claro, tener el 70% de las autopistas con peaje es un privilegio . Por no hablar del desastre de Cercanías que han presupuestado resolver varias veces y nunca han hecho ni harán.
Eiiiiii, pero 5000 millones para radiales de Madrid sí que hay y ya van por 14 autopistas de acceso compitiendo con Singapur por el liderazgo.
Si a pesar de la discriminación y el puteo constante de tener un estado en contra la economía catalana sigue funcionando tiene mucho mérito , ¿serán las dificultades lo que nos hace avanzar?
#30 Si yo soy el primero que se beneficiaría de un pacto fiscal para dejar de pagar AVE y autopistas en Andalucía, Castilla y Extremadura. Cupo vasco para todos y ya verás que risa en 10 años.
Sobre las radiales hay una artículo muy completo:
https://www.google.es/amp/www.elconfidencial.com/amp/economia/2016-12-14/por-que-han-quebrado-radiales-fallo-sistema-sin-culpables-pagaras-tu_1303565/?
Explica que el sobrecoste de 400m a 2.200m se debe sobre todo a que varios jueces acabaron considerando todo el interior de la M-50 como urbanizable y por tanto se pagaron parcelas agrícolas precio de suelo urbano... Luego está la gran idea de obligar a construir la M-50 "gratis" a las constructoras de las radiales, lo que les ha posibilitado ahora jugar con la baza de cerrar tramos de la M-50.
Por cierto, el otro día fui de Barcelona a Sant Cugat por los túneles y 15€ i/v al día en hora punta. Una estafa. Pero bueno, yo confío en que con la independencia en 18 meses se acabarán los peajes, la L9, Rodalies a la T-Sud y Abiertis será nacionalizada (valga la redundancia).
#31 Si yo soy el primero que se beneficiaría de un pacto fiscal para dejar de pagar AVE y autopistas en Andalucía, Castilla y Extremadura. Cupo vasco para todos y ya verás que risa en 10 años.
Claro, porque se ve que lo justo es que las autopistas en Catalunya las paguen los catalanes cada vez que pasan con su coche porque son gente rica. Será eso. A los madrileños desde que se independizaron de Castilla la pobre no les ha ido nada mal
. Por cierto, el otro día fui de Barcelona a Sant Cugat por los túneles y 15€ i/v al día en hora punta. Una estafa
Por 0 euros podrias haber entrado y salir de Madrid por siete autopistas del estado españl siete veces: privilegios del cenrralismo y de ser ciudadanos de primera. Ahora cuéntame que las víctimas son los responsables. Dinero publico español para rescatar esos peajes y que el ciudadano no pague no hay pero para el chanchullo de las radiales sí.
#33
¿Pero no querías la independencia para pagar todo eso con 16.000 millones anuales? Las autopistas de la Comunidad de Madrid (túneles de la M-30, M-45, M-501, M-503) y el Metro lo pagan los madrileños y por cierto el Metro Ligero y las M-45 y similares de la época Aguirre son una estafa a los ciudadanos del calibre Abertis,
En Barcelona si se acabara la L9 se solucionaría mucho, pero ya sabemos como está el tema, pagando concesiones por estaciones cerradas.
Las radiales no están sólo en Madrid, la R-2, R-3, R-4 y R-5 sí lo están (y el Eje Aeropuerto), también está la circunvalación de Alicante, la Cartagena-Vera y la AP-46.
#34 Las autopistas de la Comunidad de Madrid
¿Y las que no lo son?
Me parece maravilloso que el estado español ponga todas esas infraestructuras, ¿por qué para catalanes nunca hay dinero?
Venga, te pongo deberes. A contar autopistas del estado en Madrid :
#35 7 accesos (A1, A2, A3, A4, A42, A5, A6) y 2 circunvalaciones (la M30 ya es municipal).
¿Tienes el mapa equivalente de Barcelona? Aparte de los peajes, ¿qué se puede construir?
Es un tema que me interesa y he visto el estudio del Cercle Catalá bastante bien documentado.Según eso, en 2017-2021 se podrían liberar los peajes de la AP-2 y la AP-7
http://www.ccncat.cat/wp-content/uploads/2016/06/CCN-Estudi-03-Pla-Viablitat-Xarxa-Vi%C3%A0ria.pdf
#36 De Barcelona solo sales gratis para ir a Lleida: es lo que tiene no tener un estado a favor.
#37 Esto ya lo se ha posteado tanto que es cansino. Barcelona debería tener las autopistas de ACESA libres de peaje desde los 90.
Josep Borrell llevó a Bruselas la compra de Acesa/Abertis y el incumplimiento de las condiciones de la concesión. Todo esto con la aquiescencia -sino la colaboración activa de LaCaixa-CiU- que se las han arreglado para que una concesión perfectamente amortizada a 25 años siga funcionando 45 años después.
Las leyes franquistas de 1967
curiosamenteimpedían este expolio del pueblo catalán, sufragado por todos los españoles (seguros de cambio) que sólo ha sido posible gracias precisamente a la gestión de CiU y el Molt Honorable:https://www.ahorasemanal.es/indignacion-mal-dirigida
Una de las sentencias: http://supremo.vlex.es/vid/autopistas-peajes-impugnaciones-acesa-15209232
Borrell contando el tema:
http://ctxt.es/es/20150902/Politica/2109/Borrell-Independencia-PP-Junts-27S-Pujol.htm
No verás ninguna denuncia de Abertis o CiU o LaCaixa por difamación; esto lleva en conocimiento del público desde 1990 o antes y no es que la base de votantes de CiU les castigará mucho.
#39 go to #38
A no ser que seas votante de CiU, en cuyo caso probablemente te parezca todo correcto. #Valors
#40 GOTO
#8 Deberías recordar porque empezó todo esto en 2010... y verás que no fue por dinero.
ni por dinero ni por poder
No, por supuesto fue en 2010 y por que había armas de destrucción masiva
Igual que la primera guerra mundial fué por la muerte del archiduque y no por que nadie tuviera ganas de ampliar sus fronteras
#22 esta bién que te refieras a cosas ocurridas hace más de 100 años para mostrar tu ignorancia de lo ocurrido hace 6...
traducción:
La "operación diálogo" puesta en marcha por el gobierno español ante el proceso catalán no ha sido la primera de las que ha hecho el Estado para intentar responder a las reivindicaciones de Cataluña. Desde la eclosión del catalanismo político moderno, a finales del siglo XIX, muchas han sido las operaciones llevadas a cabo por ejecutivos de signo político. Casi todas -con alguna excepción remarcable- han acabado igual: con el gobierno español incumpliendo sus compromisos y ganando tiempo.
1899: el concierto económico, compromiso olvidado
Desde el primer Congreso Catalanista, en 1880, y el Memorial de Agravios presentado al rey Alfonso XII, se fue consolidando el catalanismo moderno. En el Mensaje a la reina regente de 1888, de tono conservador, un texto en el que Ángel Guimerà intervino directamente, se reclamaba la oficialidad del catalán, la soberanía catalana en los tribunales de justicia y que los catalanes pudieran elegir a sus gobernantes .
La presión catalanista fue creciendo, mientras perdían fuerza los partidos del régimen monárquico. Pero fue la crisis de 1898, con la pérdida de las últimas colonias, lo que hizo tambalear el Estado español, humillado en una guerra delirante con Estados Unidos. La burguesía catalana se fue separando del régimen y el catalanismo se convirtió en Barcelona una fuerza emergente.
El llamado Desastre del 98 hizo caer el gobierno y se formó un ministerio presidido por el conservador Silvela y que tenía como número dos y ministro de la guerra el general Camilo García de Polavieja, un militar que había sido gobernador de Cuba y Filipinas y conocido por su represión. Tenía ambiciones políticas y discurso aparentemente renovador contra la clase política. Con una especie de populismo de derechas se hizo popular entre sectores regionalistas catalanes, que decía defender.
Lo cierto es que Silvela formó un gobierno que quería atraerse Cataluña. El ministro catalán fue el jurista Duran y Bas, en Justicia. Se prometió regular las incompatibilidades de diputados y senadores, reducir efectivos militares y diplomáticos, y descentralizar los servicios de obras públicas. Juan Sallarès, hombre de Fomento del Trabajo y admirador de Polavieja, consiguió que Silvela se comprometiera al concierto económico y una diputación única.
El nuevo gobierno "amigo" hizo algunos gestos, como nombrar algunos alcaldes catalanistas, como el doctor Robert en Barcelona, y algunos obispos regionalistas como Torras y Bages en Vic. Entonces las designaciones episcopales estaban en manos del gobierno. Pero muy pronto surgieron los problemas. Con una hacienda que había quedado herida de muerte por la pérdida de Cuba y Filipinas, los presupuestos incluyeron fuertes cargas fiscales que molestaron industriales y comerciantes catalanes, y que fueron el origen del cierre de cajas, la revuelta fiscal que supuso una ola de represión en Catalunfolya: estado de guerra y detenciones de tenderos. Pero del concierto económico, nada de nada. Silvela negó que se hubiera comprometido. Duran y Bas y Polavieja salieron del gobierno.
1918: Alfonso XIII enreda Cambó o Cambó se deja enredar
El catalanismo se convirtió en el bloque central de la política catalana. En 1913, tras años de reivindicación, el Estado hizo una gran concesión: acordó la Mancomunidad. Fue la conquista más relevante del catalanismo, gracias al genio político de Prat de la Riba y la complicidad que encontró en el gobernante José Canalejas, un españolista inteligente. Pero el Estado hacía aguas por todas partes. El movimiento de la Asamblea de Parlamentarios del 1917, que unió el catalanismo y fuerzas democráticas del Estado como los republicanos, asustó Madrid, sobre todo cuando se extendió la protesta obrera ante la crisis de subsistencias. Asustado otra vez, el Estado cede. Se forman gobiernos de concentración con presencia catalanista de la Liga.
Francesc Cambó, el líder de la Liga a la muerte de Prat, cuenta en sus memorias una entrevista que tuvo el 15 de noviembre de 1918 con Alfonso XIII. El monarca estaba aterrizado. La guerra europea había terminado y la revolución se extendía por el continente: Rusia, Alemania ... El Borbón mostró al líder catalanista su simpatía por la causa autonomista y hasta el alentó a reclamar poder político. Poco después, se lanzó la Campaña para la Autonomía, que fue rechazada de plano por el gobierno.
Cambó fue ministro dos veces, de Fomento en 1918 y de Hacienda entre 1921 y 1922, y se sintió seducido. En algún momento, pareció que el Estado podía cambiar. Pero la realidad volvería a manifestarse de la manera más cruda: un ministro catalán, por listo que fuera, y Cambó lo era, quedaba engullido dentro del aparato del Estado, que seguía en manos de los sectores oligárquicos castellanos. La clase dirigente española sólo quería ganar tiempo.
Puig i Cadafalch confía en Primo de Rivera
En 1923, la Liga -que tenía detrás el grueso de la burguesía más dinámica- estaba decepcionada con el régimen de la Restauración. Y se dejó conquistar por la palabra ensabonadora del capital
#1 Puig i Cadafalch confía en Primo de Rivera
En 1923, la Liga -que tenía detrás el grueso de la burguesía más dinámica- estaba decepcionada con el régimen de la Restauración. Y se dejó conquistar por la palabra ensabonadora del capitán general Miguel Primo de Rivera, que se hizo amigo de Josep Puig i Cadafalch, el presidente de la Mancomunidad. Como antes con Polavieja, la derecha catalanista estaba dispuesta a seguir un militar que mostraba filoregionalisme. El capitán general de Cataluña aseguró el dirigente catalanista que si llegaba a gobernar haría una política descentralizadora. Hizo alguna declaración de simpatía por la lengua catalana, aunque no consta que dijera que hablaba en catalán en la intimidad.
Josep Puig i Cadafalch, uno de los que confió en Primo de rivera Foto: Ramon Casas (MNAC)
Barcelona y las principales ciudades vivían un clima de violencia y pistolerismo entre los grupos cenetistas y pistoleros a sueldo de la patronal. El golpe de estado de Primo de Rivera de septiembre de 1923 fue visto con esperanzas en sectores de la Liga. El resultado fue de nuevo decepcionante. Mientras se instauraba una dictadura y la CNT era reducida al silencio, Primo de Rivera olvidó las promesas. Pocos días después de llegar al poder ya emitió un decreto de represión del "separatismo". Muy pronto, la Mancomunidad comenzó a tener problemas y se instauró una política de españolización en todos los campos, incluida la prohibición de los Juegos Florales.
1960: "Operación Cataluña"
En mayo de 1960, el régimen franquista diseñó una estrategia de acercamiento a Cataluña. Los años cincuenta se habían evidenciado los primeros brotes de una oposición que, con muchos esfuerzos, se iba reconstruyendo. Hay que recordar el éxito de la huelga de tranvías de 1951, la segunda huelga que se produjo en 1957, la campaña del grupo CC, donde militaba un joven Jordi Pujol, para protestar contra la corrupción y el encarecimiento de la vida ( con pintadas con la P de protesta por diversos lugares) y, especialmente, el caso Galinsoga, en 1959, que alarmó al régimen. La protesta ciudadana contra el director de La Vanguardia, Luis Martínez de Galinsoga, hombre de ideas ultraderechistas que llamó "¡Todos los catalanas son una mierda!" En una iglesia al ver que se hacía misa en catalán, se extendió. Se llegaron a quemar ejemplares del diario de Godó y muchos suscriptores se dieron de baja. Finalmente, el director fue cesado.
El entonces alcalde de Barcelona, Josep Maria de Porcioles, fue uno de los estrategas de la Operación Cataluña. Notario de profesión, militante de la Liga en su juventud, Porcioles consiguió que las Cortes franquistas aprobaran la Compilación del derecho civil catalán, un reconocimiento a la especificidad jurídica catalana. El retorno del castillo de Montjuïc en la ciudad y la concesión a Barcelona de una Carta municipal permitió hablar de tres C (Compilación, Castillo y carta).
En el marco de esta operación de Estado, Franco visitó Cataluña en mayo de 1960. Estuvo todo el mes, alojándose en el Palau de Pedralbes y manteniendo contactos con la "sociedad civil". Incluso presidió un consejo de ministros. En este caso, sin embargo, no hubo que esperar mucho tiempo para comprobar final son llegaba la política de gestos del régimen con Cataluña.
El 19 de mayo, el Orfeón Catalán conmemoró el Palau de la Música los cien años del nacimiento de Joan Maragall. Franco tenía previsto asistir, pero finalmente no lo hizo. En el programa musical se prohibió que se incluyera el Canto de la bandera. Durante el concierto, un grupo de asistentes lo hizo, en presencia de varios ministros, y la policía intervino. A raíz de estos hechos se detuvo Jordi Pujol y otros activistas, como Francesc Pizón y Jaume Casajoana. Pujol fue sometido a consejo de guerra y condenado a siete años de prisión. Pizón, a tres años.
La historia de las diversas "operaciones Diálogo" puestas en marcha por los gobiernos españoles no da mucho margen al optimismo. Desde la transición, la estrategia del pájaro en mano logró concesiones siempre que el Gobierno de turno necesitaba apoyos en el Congreso (caso del pacto del Majestic).
Los grandes reconocimientos de soberanía fruto de un acuerdo Estado-Cataluña siempre se han producido en momentos de cambio de régimen. Porque Cataluña recuperara soberanía política, los años treinta, con el Estatuto de Nuria, tuvo que caer la monarquía borbónica y proclamarse la Segunda República. Y el retorno de la Generalitat en 1977 fue factible cuando el cadáver de Franco ya era frío.
#2 Me ha hecho mucha gracia como omite los intereses de inversores catalanes en Cuba y Filipinas.
Leyendo el artículo pareciera que Cataluña (Una, con una voluntad homogénea y con interéses únicos) está ahí a lo suyo y llega España, que es opresora, cateta y mentirosa y no para de hacerle faenas a la pobre Catalina..
Y lo de pintar a Pujol como un activista... En fin.
#9 los inversores son empresas privadas, el artículo habla del sector público.
#21 Es curioso que no habla de:
-Las dos Exposiciones Internacionales/Universales
-El seguro de cambio de las autopistas y otras inversiones en infraestructuras en Cataluña
Es muy cansino el victimismo constante mientras aragoneses, castellanos, gallegos o extremeños sufren el abandono y la despoblación.
#23 no es victimismo, es realismo
exposiciones universales hahahah no me hagas reir
autopistas de peaje pagadas millones de veces hahahaha no me hagas reir
Tantos viajecitos de la dialogadora vicepresidenta para aquí y para allá y al final se hace la foto con los cuatro mataos de su partido y se vuelve a la capital del reino empapada de dialogo.
#10 Lo mismo que el artículo, pero más divertido
Es uno de los más importantes argumentos del independentismo: El diálogo es inútil.
Total, el estado Español nunca ha cumplido
#15 Es correcto. No han cumplido lo pactado ni ua sola vez.
Cuando se pactó la cesión de un impuesto, crearon un nuevo impuesto que lo sustituía.
Cuando se pactaron presupuestos, los presupuestos no se ejecutaron.
etc.
La conclusión es que no se está hablando con personas honestas, y por lo tanto es necesario hacer otra cosa distinta de hablar.