Las auroras iluminaron América desde el norte de Canadá hasta Colombia, "el mar se convirtió en sangre" y las piedras de la playa, reflejando esa luz terrorífica, parecían ascuas en una hoguera. Si aquella semana de abril 1859, cuando ya sabíamos tanto sobre la naturaleza y sus misterios, muchos pensaron que había llegado el fin del mundo, no quiero imaginar el terror que sacudió el planeta durante la gran tormenta del 660 antes de Cristo.
"y las piedras de la playa, reflejando esa luz terrorífica, parecían ascuas en una hoguera"
Que diferencia entre supersticiosos ignorantes creyentes en seres mágicos imaginarios y la era de la ciencia, tecnología y el conocimiento. Hoy sería un espectáculo bellísimo.
Algunos demonios de antes serían hoy fenómenos de la naturaleza.
Comentarios
Que se lo digan a los venezolanos
"y las piedras de la playa, reflejando esa luz terrorífica, parecían ascuas en una hoguera"
Que diferencia entre supersticiosos ignorantes creyentes en seres mágicos imaginarios y la era de la ciencia, tecnología y el conocimiento. Hoy sería un espectáculo bellísimo.
Algunos demonios de antes serían hoy fenómenos de la naturaleza.
Estaría bien que afectase sólo a Norteamérica, para que probasen su propia medicina.