En lenguaje cortazariano, la lengua, su estudio y su práctica constituyen un itinerario a veces franqueable y otras un muro contra el que nos estrellamos y nos damos de bruces. Si brujuleamos por las redes, encontramos “palabros” muy “excitantes”, llenos de sorpresas, emociones, chistes, disparates y parafilias. La Academia poco o ningún caso hace a palabras como “heteroflexible”, “lumbersexual”, “arromántico”, “bicurioso”, “amomaxia”, “amiquesis”, “narratofilia” y “quinunolagnia”: suma y sigue. Y no se deja llevar por la riada tumultuosa...
Comentarios
Yo no soy de eso, pero de lo otro sí.
Parece el gíglico de Cortazar
Hortografilía.
Ojo, los que escribís sin faltas, que igual akguuen se corre leyendoos.
Lo que hacían los hipters con la música se hace ahora con la sexualidad.
Son tan irrelevantes como lo que nombran.
Pues demisexual si es bastante conocida ya que hay mucha gente que se siente así. Las demás sí que no las conocía.
Entiendo perfectamente porque hay últimamente tanto niño en el psicólogo...
No había oído ninguna de esas palabrejas.
A mi me sangran los hogos ver esos palabros.
Antes no era tan complicado el sexo, te pajeabas y punto.