Las acusaciones de «contaminación» política ponen en entredicho el modelo de adjudicación de contratos públicos del Principado de Asturias. Juristas y sindicatos abogan por reducir la presencia de empleados públicos de libre designación en estos procedimientos. Los expertos aseguran que el 80% de los funcionarios que deciden contratos está nombrado a dedo.
La única solución es encarcelar o inhabilitar permanentemente a quien se pruebe que comete cohecho o prevaricación. Que no se molesten en tomar otras medidas. Van a encontrar la fórmula para reírse de ellas.
#3 Exacto, el titular esta mal. Es que por su propia definición, si esta nombrado a dedo no es un funcionario, será otro tipo de empleado público. Se referirá a que solamente el 20% de los encargados de adjudicaciones funcionarios de carrera, que provienen de la administración. El resto seran amiguetes y gente del partido.
Coche, telefono y unos billetes de avión = contrato público al canto. El que lo consigue lo cuenta en la empresa a viva voz y lo más curioso, dos meses antes de que se abriesen las plicas del "concurso".
Se pasan la ley de contratos públicos por la punta del pirolo con tal de coger cacho.
Pero si antes de sacar el concurso, en la mayoría de los casos ya se sabe la empresa a la que se quiera adjudicar, y por tanto se hace el concurso a medida de la empresa...de ese modo se ajustan mucho. Si hay algo por lo que pueden perder es por la pasta del concurso, pero la calificación técnica se la han llevado antes de participar...
Lo más aberrante que he llegado a ver ha sido un concurso en el que el adjudicatario (una empresa privada) prepara, evalúa y adjudica otros concursos....
Comentarios
La única solución es encarcelar o inhabilitar permanentemente a quien se pruebe que comete cohecho o prevaricación. Que no se molesten en tomar otras medidas. Van a encontrar la fórmula para reírse de ellas.
Los cargos de libre designación no suelen ser funcionarios, o si lo son, están en otro destino distinto del suyo.
#3 Exacto, el titular esta mal. Es que por su propia definición, si esta nombrado a dedo no es un funcionario, será otro tipo de empleado público. Se referirá a que solamente el 20% de los encargados de adjudicaciones funcionarios de carrera, que provienen de la administración. El resto seran amiguetes y gente del partido.
Coche, telefono y unos billetes de avión = contrato público al canto. El que lo consigue lo cuenta en la empresa a viva voz y lo más curioso, dos meses antes de que se abriesen las plicas del "concurso".
Se pasan la ley de contratos públicos por la punta del pirolo con tal de coger cacho.
Pero si antes de sacar el concurso, en la mayoría de los casos ya se sabe la empresa a la que se quiera adjudicar, y por tanto se hace el concurso a medida de la empresa...de ese modo se ajustan mucho. Si hay algo por lo que pueden perder es por la pasta del concurso, pero la calificación técnica se la han llevado antes de participar...
Lo más aberrante que he llegado a ver ha sido un concurso en el que el adjudicatario (una empresa privada) prepara, evalúa y adjudica otros concursos....
Son sus corruptelas y hay que respetarlas.