Hasta hace muy poco, lo normal era que el fútbol se jugara -y televisara- únicamente los fines de semana. La razón era obvia: los aficionados, después de trabajar toda la semana, necesitaban liberar tensiones y disfrutar de algo sin tener que pensar demasiado, y claro, el fútbol es ideal para eso. Hoy en día eso de trabajar ya no se lleva tanto, y claro, el tiempo en que uno puede estar ocioso puede llegar a ocupar toda la semana, es lógico que la oferta de ocio se ajuste a estas circunstancias.
Comentarios
Eso es totalmente falso. Desde que tengo uso de razon se ha televisado futbol entre semana, ya sea de competición europea o Liga. Esto se ve agravado las temporadas de mundial, ya que hay muchas memos semanas para jugar la Liga y hay que hacer muchas jornadas a mitad semana. Sensacionalista.
Con Pan y Circo se mantiene al pueblo contento
Esta comprobado que la gente que "reza", "ve television", o va al medico bajan la actividad cerebral y casi se "desconectan".
Como Zombies... drogados
Menudo delirio... aparte de que el autor es tan elitista y tan exquisito que hasta a mí, que no me gusta el fútbol, me da vergüenza lo que escribe, esto es de psiquiatra
"Como ven, esta ampliación de horario futbolístico no es fruto de la casualidad. Como tampoco es casualidad que en España el periódico más leído sea el Marca; como tampoco es casualidad que haya más de la mitad de españoles que no se leen un libro al año, y además presuman de ello."
No, casualidad no es... eso ocurre por dos cosas. Una es que este es un país libre y los españoles se dejan el dinero en lo que les da la realísima gana y les gusta, que en general es el fútbol. La otra es que a las empresas les gusta ganar dinero y lo que más dinero les deja es el fútbol, porque es lo que les gusta a más españoles.
Aparte, Spain is NOT different. Algo tendrá el vino cuando lo bendicen y algo tendrá el fútbol cuando es tan abrumadoramente popular "aquí y en China". Personalmente no comparto ese gusto, pero creo que el fútbol es una fuerza positiva en el mundo. Jamás he visto nada capaz de llenar un bar de amarillos, negros y blancos vibrando y riendo juntos, aparte de un partido del Real Madrid (y eso que era en Pamplona)