Hace 12 años | Por KhoTao a europapress.es
Publicado hace 12 años por KhoTao a europapress.es

En su último boletín, la entidad que dirige María Luisa Cava del Llano asegura haber recibido "varias quejas" sobre "las dificultades existentes en los centros sanitarios del Servicio Madrileño de Salud (Sermas) para que se permita el acompañamiento de pacientes que requieren una especial protección", tales como menores de edad, discapacitados o mayores en situación de fragilidad.

Comentarios

tocameroque

En Valencia la norma es que mayores de 18 y menores de 65 entren sólos, excepto cuando han de dar el alta o ingreso para explicar a los familiares el estado del paciente. Afortunadamente y bajo criterio médico esta norma se trasgrede frecuentemente para que un familiar esté acompañando al paciente.
En mi caso concreto mi madre ha tenido frecuentes ingresos en urgencias hasta que el cáncer se la llevó y siempre me han permitido permanecer con ella, lo que - supongo - habrá supuesto para ella un consuelo y para mí tranquilidad .

YowY

#3 Trabajo en la sanidad y son los únicos que vienen avasallando y faltando a las leyes "de los payos" como dicen ellos. No es racismo, es mas bien realismo. Te invito a pasar una noche conmigo en urgencias y por la mañana me vuelves a dar la definición de racismo.

YowY

El problema de el acompañamiento es que lo han de regular extrictamente por culpa de "esa etnia" y su manera de no respetar las normas por que sí.
Siendo ordenados y respetuosos con todos, siempre se podría estar acompañado en el médico tuvieras la edad que tuvieras. Pero por culpa de algunos hay que regular esto.

m

Para eso esta el trabajo de celador ¿no?. Pedid un celador, veras como dejan pasar al que sea con tal de no gastar un salario mas.


#2 Comentario muy racista ¿no?. Ayer en urgencias la que monto la gresca era una señora de unos cincuenta años de las que se gastan 60€ en peluquería cada 3 días a la que le habían dado una silla de ruedas y ademas pedía también una almohada.
Amenazaba con irse, mientras decía en voz alta que para que había venido y efectuaba diversas llamadas desde su "smartfon" que no sabia ni usar, vamos que gitana no era. En la sala había también un marroquí, una sudamericana y una filipina, había de todas las etnias menos negros, gitanos y chinos/japoneses (a estos últimos no los suelo diferenciar muy bien)