Hace 10 años | Por JordyCA a eju.tv
Publicado hace 10 años por JordyCA a eju.tv

La masturbación por sí misma, al ser una práctica placentera, ayuda a tener un mejor sistema inmunológico, debido a que al eyacular se liberan diversas hormonas, como el cortisol, que en pequeñas cantidades mejoran la respuesta y defensas, según un estudio de la Universidad de Sydney, Australia.

Comentarios

berzasnon

#0 Deja de pisarle meneos a@muchaspajas

noexisto

Enfermedades que previene el copypaste: el voto negativo http://sexualidad.salud180.com/sexualidad/5-enfermedades-que-previene-la-masturbacion

IndividuoDesconocido

#3 Querrás decir que "provoca" no que "previene"

noexisto

#8 es una coña con el titular

D

Que yo recuerde yo no he estado enfermo nunca. Lo único raro que tengo, no sé si será una enfermedad, es el síndrome de la polla inquieta.

D

#2 Pero al menos estarás delgado y contento ¿no?

Que pena tener que jugar en solitario cuando el juego se diseñó para ser multijugador.

D

#5 Muy delgado no estoy, no sé si será porque ayer me comí un kilo de merengues y dos kilos de turrón acompañado con una docena de tabletas de chocolate y un kilo de polvorones rusos Estepa.

Una cosa no quita a la otra, puedes jugar en modo multijugador o en modo solitario, pero la paja sale más barato que ir de putas.

D

#6 Definitivamente... estás contento!!!!

PeterDry

La ceguera.

mopenso

#13 No es un mal plan. Normalmente el que paga fantas acaba en un 5x1 (otro).

mopenso

Noticia trampa para pajilleros, aunque en el caso del cáncer no veo la manera de alcanzar las 5 por semana sin evocar al sabio Onán.

D

#9 ¿Cinco por semana? Yo me hago más de cinco todos los días... y diez también.

mopenso

#11 El resto de los mortales conocemos formas más cooperativas de eyacular. Son mejores en calidad aunque pobres en cantidad, si se quiere alcanzar el nivel de prevención del cáncer.
Pero ya que lo comentas, debo decir que me alegro de ser incapaz de cascármela 10 veces en un día, incluso cinco. Se me antoja una condena, tío.

D

#12 Una condena sería pagar fantas para que te la chupen, por ejemplo.