Con Ruiz Gallardón en la alcaldía, ni los monumentos históricos están a salvo de la piqueta. El alcalde dirige ahora su mirada hacia la Plaza Mayor. Pretende repintarla, cambiar los tejados, el pavimento y retirar la estatua de Felipe III, monarca que inauguró la plaza en 1619.
Titular tendencioso en una encuesta extremadamente fiable: De las 10 personas consultadas esta semana in situ por Libertad Digital ninguna está de acuerdo con los planes del alcalde...
Y muy graciosas sus declaraciones...
Joaquín, un jubilado madrileño “de toda la vida” que la cruza todas las tardes en su paseo diario, asegura, apoyándose con firmeza en su bastón, que “tocarla sería un crimen”.
Dos jóvenes argentinas, Alejandra y Carolina, de viaje en Madrid por tercera vez, no terminan de entender como el alcalde quiere cambiar algo en una plaza que, tal y como apunta Carolina, “es lindísima”, a lo que Alejandra remata: “yo no movería nada, todo está en su sitio”.
Juana, burgalesa adoptada por la capital hace más de 20 años, es de la opinión de que “este alcalde es una calamidad, no hace más que enredar y levantar zanjas que Dios sabe lo que nos están costando. Si termina haciendo todo eso que me estás contando va a desfigurar la plaza. Espero que no le dejen o que se le haya acabado el dinero.”
Pues lo cierto es que la famosa estatua es un incordio a la hora de realizar actos públicos en la plaza. No digo que la quiten, pero seguro que podría estar en otro lugar de la plaza. La practicidad y el avance no debería estar reñido con las costumbres. Se trata de llegar a un punto medio.
Con cada cosa que dice o hace, queda más patente que este alcalde es un grandísimo memo, un ególatra y un payaso, aparte de que su equipo municipal no tiene ni puta idea de urbanismo ni de lo que es una ciudad agradable o enfocada a ser disfrutada por sus ciudadanos. Lo único que saben hacer es plazas duras inhóspitas y monumentos y construcciones al mal gusto y al mamotretismo. Zanjardón, de verdad, deja Madrid en paz de una vez. Los que (sobre)vivimos aquí te lo agradeceremos.
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Titular tendencioso en una encuesta extremadamente fiable: De las 10 personas consultadas esta semana in situ por Libertad Digital ninguna está de acuerdo con los planes del alcalde...
Y muy graciosas sus declaraciones...
Joaquín, un jubilado madrileño “de toda la vida” que la cruza todas las tardes en su paseo diario, asegura, apoyándose con firmeza en su bastón, que “tocarla sería un crimen”.
Dos jóvenes argentinas, Alejandra y Carolina, de viaje en Madrid por tercera vez, no terminan de entender como el alcalde quiere cambiar algo en una plaza que, tal y como apunta Carolina, “es lindísima”, a lo que Alejandra remata: “yo no movería nada, todo está en su sitio”.
Juana, burgalesa adoptada por la capital hace más de 20 años, es de la opinión de que “este alcalde es una calamidad, no hace más que enredar y levantar zanjas que Dios sabe lo que nos están costando. Si termina haciendo todo eso que me estás contando va a desfigurar la plaza. Espero que no le dejen o que se le haya acabado el dinero.”
¿Quiere quitar el color rojo de las fachadas de los edificios? este tío está loco!!
Pues lo cierto es que la famosa estatua es un incordio a la hora de realizar actos públicos en la plaza. No digo que la quiten, pero seguro que podría estar en otro lugar de la plaza. La practicidad y el avance no debería estar reñido con las costumbres. Se trata de llegar a un punto medio.
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De Madrid al suelo
escolar.net(Y cuando Escolar y LD tiran pal mismo lado, algo va mal)
Pero todavía le prestan los bancos, o ya sólo le presta Caja Madrid.
BTW: ¿Consiguió meter los consejeros que pretendía ?
Con cada cosa que dice o hace, queda más patente que este alcalde es un grandísimo memo, un ególatra y un payaso, aparte de que su equipo municipal no tiene ni puta idea de urbanismo ni de lo que es una ciudad agradable o enfocada a ser disfrutada por sus ciudadanos. Lo único que saben hacer es plazas duras inhóspitas y monumentos y construcciones al mal gusto y al mamotretismo. Zanjardón, de verdad, deja Madrid en paz de una vez. Los que (sobre)vivimos aquí te lo agradeceremos.