Hace 12 años | Por --150494-- a redescristianas.net
Publicado hace 12 años por --150494-- a redescristianas.net

Me resulta patético que el Vaticano acabe de condenar la obra Nada más que el amor. Un marco para una ética sexual cristiana, de la monja teóloga Margaret A. Farley. La condenan. ¿Y por qué? Por sostener que la masturbación como tal no plantea ningún problema moral, que las relaciones homosexuales –al igual que las heterosexuales– son buenas si hay amor, que el matrimonio homosexual tiene la misma dignidad del heterosexual, que el matrimonio se disuelve cuando por lo que sea ya no hay amor, y que los divorciados hacen bien si vuelven a casarse…

Comentarios

EternoViajero

Una pregunta ya que se habla del vaticano.... Italia tb está jodida por la crisis... pero y el Vaticano? A estos solo se les escucha cuando se habla de pedofilia y cosas del estilo , no? Nada de crisis para estos?

D

#1 Igual que aquí lamentablemente. ¿Acaso has oído a la CEE decir algo de la crisis de las amnistías fiscales o de que no es justo que se la hagan pagar a los que menos tienen que no son además quienes la han creado?

D

#1 Si el Vaticano tuviera algún problema de dinero, el Papa sólo tiene que bajar al sótano, pillar un cuadro cualquiera y venderlo, tienen miles de piezas de valor incalculable...

YoTambienVeoMuertos

#1 "Nada de crisis para estos?"

Pues NO! La Iglesia vive y hace "caja" cuando el ser humano esta en crisis. ¿Cielo o infierno?

No es nuevo ni reciente; lo llevan haciendo desde hace 20 siglos. No hay empresa más duradera, ni que mejor haya vendido su producto a lo largo de la historia. ¿Dios o el diablo?

Usted elije...

r

Completamente de acuerdo con el artículo del teólogo Arregui.

El Vaticano, con este papa a la cabeza, sigue anclado en el pasado.

Ya va siendo hora de que asuma los valores de la sexualidad, la homosexualidad y una ética más adaptada a los tiempos que corren...

D

Inefable este Arregui, gran teólogo por otra parte, al que como no pueden rebatir lo castigan al silencio. Qué persona mínimamente normal no suscribiría estas palabras?...
La condenan por lo de siempre: esa obsesión represiva del placer sexual. Nunca –estoy seguro– habrían declarado “pecado” la masturbación ni las relaciones prematrimoniales ni las relaciones homosexuales, si no hubiera placer físico de por medio. Ni condenarían el divorcio si ellos estuvieran casados. Y no nos vengan con que la Biblia manda esto o prohíbe lo otro o que la tradición enseña lo de más allá, pues la Biblia manda también que los obispos se casen y prohíbe comer embutidos, y así se hizo en la tradición primera. El placer les atrae y les asusta, y por eso lo condenan. Pero la condena del placer es una blasfemia contra el cuerpo sagrado, la santa creación. Pues ¿qué celebran estos obispos y el Vaticano en la fiesta del Corpus, si son tan enemigos del cuerpo y sus placeres? ¿Es que nunca han amado? ¿O es que ni siquiera han leído el Cantar de los Cantares?