La noticia reciente de la señora Aguirre, sobre la segregación de la “créme de la créme” de las aulas madrileñas en centros de élite intelectual desprovistos de la plebe mediocre; ha abierto la dialéctica entre antropólogos y psicólogos acerca de la dicotomía entre la dosis de determinismo biológico de la inteligencia humana y su ingrediente cultural.
Comentarios
Yo a la Sra. Aguirre le sugeriría que ya que nos hemos puesto, a los menos aptos los podríamos capar. Pa que no procreen y eso.