«Desalojos» casi imposibles... No son casos aislados. Forman parte de una retahíla de ejemplos cazados al vuelo en una mañana de visitas a algunos centros hospitalarios. Componen el día a día de los hospitales españoles que, cada jornada, se encuentran con alguno de estos «okupas» inesperados e indeseados. Gente que prolonga su estancia en camas que necesitan enfermos o heridos que, mientras, esperan en urgencias, en los pasillos o en los vestíbulos.
Comentarios
Falla el sistema hospitalario, estas personas que tienen una enfermedad crónica para largo o que son muy mayores y no tienen a nadie que les cuide, deberían poder derivarse a otro tipo de asistencia que no fuera la hospitalaria general. A la vez debería haber una regulación concreta para los casos de caraduras, aunque por suerte como dice el artículo son los menos.
#1 Falla pero es que la gente es egoista, aplican el "ande yo caliente..." y no piensan que los hopitales son para la gente que realmente esta enferma, luego vienen los problemas y cuando se necesita de verdad atención médica la respuesta es la misma "estamos faltos de camas". Lo que dices es la lógica, el problema es que la gente piensa, cuando quieren derivarles a otro hospital, que se les quieren quitar de encima. Ahí es donde entra en función el Asistente Social. Ese es su trabajo entre otros.
Claro, recortas en gastos sociales, inexistentes casi en España y pasa lo que pasa.