“El suicidio ya no es un tema tabú, pero faltan medidas concretas para combatirlo y también médicos más sensibles”, afirma Georg Fiedler, del programa de prevención de suicidios en Hamburgo en una conversación con dpa. Y las listas de espera a la hora de acudir al médico o los terapeutas agravan la situación. En el grupo de riesgo de las personas que tienen a suicidarse de encuentran enfermos, personas mayores, drogodependientes y adictos al alcohol, pero también gente con origen migratorio.
Comentarios
¿Tanto? ¿Y no acaba de morirse nunca esa persona?
#3 Es que es el "esmirriaó" y solo se suicida de broma
#4 Para mi felicidad es lo que dice Ayn Rand:
"La felicidad es un estado de alegría sin contradicciones. Es posible sólo para el hombre racional, el hombre que sólo desea objetivos racionales, sólo persigue valores racionales y sólo encuentra su alegría en acciones racionales".
Si obras así dificilmente tengas desengaños que te conduzcan al suicidio.
Solo puede quedar uno.
Relacionado: http://www.who.int/mediacentre/events/annual/world_suicide_prevention_day/es/index.html
http://www.iasp.info/es/index.php
"Y las listas de espera a la hora de acudir al médico o los terapeutas agravan la situación" Es muy fácil echarle la culpa a la falta de medios, cuando es algo que se pueda minimizar simplemente con más empatía por parte de todos.
#2 Eso me ha recordado la pantomima de aquel "congreso sobre la felicidad" patrocinado por Coca-Cola y celebrado en España bajo el beneplácito de Punset. Era curioso ver cómo se reunían multitud de psicólogos para debatir sobre el concepto "felicidad" y encontrar la panacea para el malestar de la cultura y, sin embargo, el colmo era no encontrar ningún ético, político etc. En algún momento de nuestra historia cultural el concepto "felicidad" ha terminado por convertirse en algo tan interior como íntimo de la persona hasta el punto de que la infelicidad no puede provenir del exterior, no podemos culparnos más que a nosotros mismos.
Y ahi va otro.
Joder, pues como debe de estar la pobre.
Pobrecito. Espero que no sea siempre la misma persona.