A estas alturas, a nadie le sorprende afirmar que la práctica de ejercicio es un elemento indispensable para llevar una vida saludable. Pero lo que mucha gente no sabe es que existen actividades como el pilates que dejan atrás lo saludable para poder ser calificadas como actividades medicinales. Algunas de sus aplicaciones se llevan a cabo incluso como tratamiento para prevenir enfermedades como el cáncer.
Candia Raquel Garibay, fundadora de Inspirah Pilates, recopiló en tres puntos las que se consideran las tres razones principales por las que podemos afirmar que practicar pilates nos ayuda a prevenir el cáncer.
La primera razón es que el cáncer es anaeróbico. La respiración es la base de nuestra salud (así lo creía Joseph Pilates, fundador de esta disciplina) y así lo demuestra la importancia de oxigenar bien nuestras células. Por este motivo el pilates gira entorno a la respiración y, por eso mismo, entrenar una correcta respiración nos previene de complicaciones.
En el segundo punto, Candia Raquel habla de la importancia de la autoconsciencia del cuerpo. Es decir, el pilates busca un control total del cuerpo, en el que uno es consciente de todo lo que ocurre en su cuerpo. Evidentemente, este punto se extrapola en la consciencia de acudir a los chequeos médicos con la frecuencia recomendada.
Por último, la tercera razón relaciona el pilates como una actividad antiinflamatoria, algo que se contrapone a la inflamación celular previa que se ha demostrado que se produce en enfermedades degenerativas como el cáncer.
Así, con dos cojones.
Me invento esta sarta de chorradas sin contrastarlas con ningún estudio que avale estas afirmaciones.
Y si cuela, cuela.
Comentarios
La asociación de monitores y gimnasios de pilates financia este estudio.
La primera razón es que el cáncer es anaeróbico.
Falso.
#0 Los spammers son el cáncer de Meneame
@rosacastellano
Candia Raquel Garibay, fundadora de Inspirah Pilates, recopiló en tres puntos las que se consideran las tres razones principales por las que podemos afirmar que practicar pilates nos ayuda a prevenir el cáncer.
La primera razón es que el cáncer es anaeróbico. La respiración es la base de nuestra salud (así lo creía Joseph Pilates, fundador de esta disciplina) y así lo demuestra la importancia de oxigenar bien nuestras células. Por este motivo el pilates gira entorno a la respiración y, por eso mismo, entrenar una correcta respiración nos previene de complicaciones.
En el segundo punto, Candia Raquel habla de la importancia de la autoconsciencia del cuerpo. Es decir, el pilates busca un control total del cuerpo, en el que uno es consciente de todo lo que ocurre en su cuerpo. Evidentemente, este punto se extrapola en la consciencia de acudir a los chequeos médicos con la frecuencia recomendada.
Por último, la tercera razón relaciona el pilates como una actividad antiinflamatoria, algo que se contrapone a la inflamación celular previa que se ha demostrado que se produce en enfermedades degenerativas como el cáncer.
Así, con dos cojones.
Me invento esta sarta de chorradas sin contrastarlas con ningún estudio que avale estas afirmaciones.
Y si cuela, cuela.