Desde hace unos días (¿meses? ¿años?) se oye por todas partes hablar de los "papeles de Salamanca". Sin unirme a opinar sobre dónde deben descansar los átomos que los componen (que es en lo que parece que se centran casi todos los debates), me animo a hacer algún comentario sobre los bits que se pueden obtener a partir de ellos (que para muchos fines, quizás sean más importantes).
Yo he leído que los llamados papeles de Salamanca ya los han digitalizado y ha quedado una copia informática en Salamanca. O sea que la información que contienen sigue estando a disposición de los investigadores que lo soliciten, y si no se tiene acceso "on line" a ellos será porque la dirección del Archivo de la Guerra Civil de Salamanca no quiere o no puede ofrecerlo en internet.
Por otra parte, estoy de acuerdo en que digitalizar e informatizar los archivos de muchísimos sitios tendría que ser, quizá, una prioridad. No se llega a entender bien cómo es eso de que estemos sosteniendo con fondos públicos multitud de archivos y bibliotecas que luego no pueden ser consultados libremente por todos los ciudadanos. No me he puesto a hacer cuentas de cuánto costaría digitalizar los documentos, pero no creo que fuera una cantidad inasumible, teniendo en cuenta el caso de otras partidas y gastos desorbitados y/o poco claros que la administración pública asume con total resignación (y a veces con entusiasmo poco disimulado), como subvenciones a empresas privadas, amortizaciones varias, protocolos, reparaciones de obras públicas acabadas de terminar, etc. A no ser que tengamos en cuenta el hecho de que siempre que hay una administración pública por en medio, resulta que los presupuestos se inflan y se inflan y al final, una cosa que a un particular le puede costar, pongamos por caso, 1.000€ resulta que a una administración pública le sale, como por arte de magia (negra, en este caso), por 10.000€. Pero ese ya es otro tema.
Yo pienso lo mismo.
Lo que passa es que los papeles los ven como una obra de arte, no se puede reproducir y quedarse tan tranquilo. Hay cierto sentimiento de nostalgia en ellos.
Aqui hay dos puntos a tener en cuenta:
1.- Poner a disposición del público la información de un archivo. Yo soy de la opinión que cualquier institucuión mantenida con fondos públicos, deberia tener como obligacion digitalizar sus fondos y permitir el acceso a esa informacion libre y gratuitamente a cualquiera.
Lo debe hacer el archivo de Salamanca que supongo que esta digitalizado o el de Indias que se digitalizó con ayuda de IBM y no está en la red.
2.- Custodia de dociumentos. Otra cosa es la custodia del material físisco, documento, cuadro, objeto etc. Yo soy partidario de mantenerlos protegidos y reunidos en un solo sitio, porque si por la razon que fuera un investigador necesita acceder al elemento fisico por no tener bastante con el digital, (Supongamos que quiere estduiar si las firmas en los documentos son reales o falsas o cosas asi), el tener reunidos esos elementos físicos en un solo lugar facilita la investigación.
En ese sentido lamento la dispersión del archivo de Salamanca como lamentaría la del archivo de Simancas, de Sevilla o de la Corona de Aragón. Creo firmemente, por encima de decimononicos nacionalismos de uno y otro lado, que ha sido un error dispersar el archivo.
Comentarios
Yo he leído que los llamados papeles de Salamanca ya los han digitalizado y ha quedado una copia informática en Salamanca. O sea que la información que contienen sigue estando a disposición de los investigadores que lo soliciten, y si no se tiene acceso "on line" a ellos será porque la dirección del Archivo de la Guerra Civil de Salamanca no quiere o no puede ofrecerlo en internet.
Por otra parte, estoy de acuerdo en que digitalizar e informatizar los archivos de muchísimos sitios tendría que ser, quizá, una prioridad. No se llega a entender bien cómo es eso de que estemos sosteniendo con fondos públicos multitud de archivos y bibliotecas que luego no pueden ser consultados libremente por todos los ciudadanos. No me he puesto a hacer cuentas de cuánto costaría digitalizar los documentos, pero no creo que fuera una cantidad inasumible, teniendo en cuenta el caso de otras partidas y gastos desorbitados y/o poco claros que la administración pública asume con total resignación (y a veces con entusiasmo poco disimulado), como subvenciones a empresas privadas, amortizaciones varias, protocolos, reparaciones de obras públicas acabadas de terminar, etc. A no ser que tengamos en cuenta el hecho de que siempre que hay una administración pública por en medio, resulta que los presupuestos se inflan y se inflan y al final, una cosa que a un particular le puede costar, pongamos por caso, 1.000€ resulta que a una administración pública le sale, como por arte de magia (negra, en este caso), por 10.000€. Pero ese ya es otro tema.
Es cierto, lo mejor seria digitalizar estos y otros documentos, porque lo importante es la informacion que contienen.
Yo pienso lo mismo.
Lo que passa es que los papeles los ven como una obra de arte, no se puede reproducir y quedarse tan tranquilo. Hay cierto sentimiento de nostalgia en ellos.
Aqui hay dos puntos a tener en cuenta:
1.- Poner a disposición del público la información de un archivo. Yo soy de la opinión que cualquier institucuión mantenida con fondos públicos, deberia tener como obligacion digitalizar sus fondos y permitir el acceso a esa informacion libre y gratuitamente a cualquiera.
Lo debe hacer el archivo de Salamanca que supongo que esta digitalizado o el de Indias que se digitalizó con ayuda de IBM y no está en la red.
2.- Custodia de dociumentos. Otra cosa es la custodia del material físisco, documento, cuadro, objeto etc. Yo soy partidario de mantenerlos protegidos y reunidos en un solo sitio, porque si por la razon que fuera un investigador necesita acceder al elemento fisico por no tener bastante con el digital, (Supongamos que quiere estduiar si las firmas en los documentos son reales o falsas o cosas asi), el tener reunidos esos elementos físicos en un solo lugar facilita la investigación.
En ese sentido lamento la dispersión del archivo de Salamanca como lamentaría la del archivo de Simancas, de Sevilla o de la Corona de Aragón. Creo firmemente, por encima de decimononicos nacionalismos de uno y otro lado, que ha sido un error dispersar el archivo.