No a todo el mundo le gusta superman. Incluso se puede llegar a pensar en que uno de los comics más aburridos que se pueden encontrar en los kioscos ¿o tal vez no?
Se agradecería que el dueño de esa web usase una fuente que no agrediese mis ojos de una forma tan violenta. He tenido que esforzarme para poder terminar de leerlo del todo.
gracias por los comentarios. Intentaré arreglar lo de la fuente. Ocurre que la idea del blog no era la de entrar textos tan largos, y quedaba bien. SIn embargo, y teneis toda la razón, para entradas largas no funciona. De nuevo gracias por los comentarios y vuestra paciencia.
Lo siento, no puedo leer la entrada. La fuente me produce dolor físico. La C/P aquí como alternativa:
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Pero, en serio ¿a alguien le puede gustar Superman? Si analizamos objetivamente su origen, sus poderes y su personalidad creo que podemos llegar a la conclusión de que nos encontramos ante el superhéroe más sosaina del universo DC, y por qué no decirlo, del mundo de los comics en su máxima amplitud.
Veamos, si nos remontamos al principio, podemos ver que llego en una bonita nave espacial que aterrizó en el bucólico pueblo de Smallville, allá por la América profunda. Su familia era humilde, sí, pero le dieron un entorno familiar pleno de cariño, amor (y de azúcar), en una bonita granja que cuidaba su padre adoptivo. Iba al instituto a estudiar, y aunque no fue el más popular de la clase, tampoco le fue tan mal. Conoció a alguna que otra chica, obtuvo buenas notas y aprovechándose de sus poderes, pudo esquivar a los abusones del lugar. Y así Clark tuvo lo que se dice una infancia feliz.
Seguimos su biografía y esta nos lleva a Metropolis, donde ejerce de periodista en el Daily Planet, prestigioso rotativo al que accede como por arte de magia. Se rodea de buena gente, conoce a Lois, Jimmy Olsen, Perry White y a trabajar. Para proteger su identidad "secreta", simplemente con ponerse unas gafas y llamarse Clark Kent, solucionado. ¡Increíble!, rodeado de sagaces periodistas capaces de detectar la mínima pista que les proporcione un buen tema, y ninguno de ellos es
capaz de darse cuenta de que Clark y Superman son la misma persona. ¡A la calle con todos ellos, hombre!
En fin, que a pesar de que los guionistas intentan que la vida le de algunos sinsabores, podemos llegar a la conclusión de que podría ser la envidia de cualquiera de nosotros, ¿a que si? Otra cosa son los pequeños desengaños amorosos que se pueda llevar, más propios de un jovenzuelo de sensación de vivir que de un adulto de Metropolis. Porque sería todo lo super que quisiera, pero las mujeres no eran lo que se dice su fuerte. Suerte tuvo de que Lois acabara siendo su mujer... mucha suerte, diría.
Y llegamos al quid de la cuestión, su alter-ego superheróico, su cruzada en pos del bien y la justicia, en defensa del débil y del inocente. Porque claro, parece que es inherente al hecho de ser el más poderoso de la tierra que tengas además que ser el más bueno de todos los buenos. Si no, ser el malo digamos que estaría bastante mal visto, y podríamos llegar a pesar que nos encontramos ante un verdadero abusón, así que prohibido cualquier atisbo de maldad, a menos que quieras que el primer número de la colección sea también el último.
Vayamos con lo importante, los poderes... tiene super-velocidad, super-fuerza, super-visión, puede volar y es invulnerable. Vamos, que lo tiene todo menos una cosa, mérito. Porque digo yo, que si tienes todos estos poderes y alguno que me dejo, muy difícil no debería ser ejercer de héroe ¿no? Si, ya se que algún que otro malvado le planta cara y los guionistas intentan hacernos
creer que alguno de estos lo podría derrotar. Incluso llegó un tal Juicio Final que quiso cargárselo a base de tortazos, sin planes maquiavélicos por medio y con el único propósito de tener sus cinco minutos de gloria.¿Cómo? ¿que un matón de tres al cuarto mató a Superman después de nosecuantos años de batallas sin cuartel contra el mal? Sí, y más sí. O esto, o Superman se compraba una casita en la costa Este y se iba a gozar de una bonita jubilación anticipada. Porque lo que era vender comics, muchos no vendían, aburriendo hasta las ostras como hacía con las mismas historias de siempre y con unos enemigos que no le desearía ni a Scooby-Doo.
¡Bravo! por los que diseñaron la estrategia comercial que dio sus frutos, dándole algo de vidilla al superhéroe de marras.
Pero Superman siguió, y sigue, siendo un héroe palizas donde los haya, aburridote de tan buena persona que es y con el mérito de ser el único héroe que sufre derrotando a sus enemigos cuando lo podría hacer sin levantarse del sofá.
Y todo esto lo digo desde el cariño, que conste en acta, porque la historia del comic no sería la misma sin Superman, y si no existiera, habría que inventar uno, ¿verdad?
Comentarios
Un poco de esa fuente estaría bien, algo de texto aceptable (es una web de comic), toda la puta página con la misma fuente, es un atentado visual.
Vale, pensé que sería el único a quien esa fuente le estaba matando, gracias #2 y #3, a #1 no sé qué decirle porque no entiendo bien su comentario
Se agradecería que el dueño de esa web usase una fuente que no agrediese mis ojos de una forma tan violenta. He tenido que esforzarme para poder terminar de leerlo del todo.
Hola
gracias por los comentarios. Intentaré arreglar lo de la fuente. Ocurre que la idea del blog no era la de entrar textos tan largos, y quedaba bien. SIn embargo, y teneis toda la razón, para entradas largas no funciona. De nuevo gracias por los comentarios y vuestra paciencia.
Solucionado lo de la fuente...
Lo siento, no puedo leer la entrada. La fuente me produce dolor físico. La C/P aquí como alternativa:
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Pero, en serio ¿a alguien le puede gustar Superman? Si analizamos objetivamente su origen, sus poderes y su personalidad creo que podemos llegar a la conclusión de que nos encontramos ante el superhéroe más sosaina del universo DC, y por qué no decirlo, del mundo de los comics en su máxima amplitud.
Veamos, si nos remontamos al principio, podemos ver que llego en una bonita nave espacial que aterrizó en el bucólico pueblo de Smallville, allá por la América profunda. Su familia era humilde, sí, pero le dieron un entorno familiar pleno de cariño, amor (y de azúcar), en una bonita granja que cuidaba su padre adoptivo. Iba al instituto a estudiar, y aunque no fue el más popular de la clase, tampoco le fue tan mal. Conoció a alguna que otra chica, obtuvo buenas notas y aprovechándose de sus poderes, pudo esquivar a los abusones del lugar. Y así Clark tuvo lo que se dice una infancia feliz.
Seguimos su biografía y esta nos lleva a Metropolis, donde ejerce de periodista en el Daily Planet, prestigioso rotativo al que accede como por arte de magia. Se rodea de buena gente, conoce a Lois, Jimmy Olsen, Perry White y a trabajar. Para proteger su identidad "secreta", simplemente con ponerse unas gafas y llamarse Clark Kent, solucionado. ¡Increíble!, rodeado de sagaces periodistas capaces de detectar la mínima pista que les proporcione un buen tema, y ninguno de ellos es
capaz de darse cuenta de que Clark y Superman son la misma persona. ¡A la calle con todos ellos, hombre!
En fin, que a pesar de que los guionistas intentan que la vida le de algunos sinsabores, podemos llegar a la conclusión de que podría ser la envidia de cualquiera de nosotros, ¿a que si? Otra cosa son los pequeños desengaños amorosos que se pueda llevar, más propios de un jovenzuelo de sensación de vivir que de un adulto de Metropolis. Porque sería todo lo super que quisiera, pero las mujeres no eran lo que se dice su fuerte. Suerte tuvo de que Lois acabara siendo su mujer... mucha suerte, diría.
Y llegamos al quid de la cuestión, su alter-ego superheróico, su cruzada en pos del bien y la justicia, en defensa del débil y del inocente. Porque claro, parece que es inherente al hecho de ser el más poderoso de la tierra que tengas además que ser el más bueno de todos los buenos. Si no, ser el malo digamos que estaría bastante mal visto, y podríamos llegar a pesar que nos encontramos ante un verdadero abusón, así que prohibido cualquier atisbo de maldad, a menos que quieras que el primer número de la colección sea también el último.
Vayamos con lo importante, los poderes... tiene super-velocidad, super-fuerza, super-visión, puede volar y es invulnerable. Vamos, que lo tiene todo menos una cosa, mérito. Porque digo yo, que si tienes todos estos poderes y alguno que me dejo, muy difícil no debería ser ejercer de héroe ¿no? Si, ya se que algún que otro malvado le planta cara y los guionistas intentan hacernos
creer que alguno de estos lo podría derrotar. Incluso llegó un tal Juicio Final que quiso cargárselo a base de tortazos, sin planes maquiavélicos por medio y con el único propósito de tener sus cinco minutos de gloria.¿Cómo? ¿que un matón de tres al cuarto mató a Superman después de nosecuantos años de batallas sin cuartel contra el mal? Sí, y más sí. O esto, o Superman se compraba una casita en la costa Este y se iba a gozar de una bonita jubilación anticipada. Porque lo que era vender comics, muchos no vendían, aburriendo hasta las ostras como hacía con las mismas historias de siempre y con unos enemigos que no le desearía ni a Scooby-Doo.
¡Bravo! por los que diseñaron la estrategia comercial que dio sus frutos, dándole algo de vidilla al superhéroe de marras.
Pero Superman siguió, y sigue, siendo un héroe palizas donde los haya, aburridote de tan buena persona que es y con el mérito de ser el único héroe que sufre derrotando a sus enemigos cuando lo podría hacer sin levantarse del sofá.
Y todo esto lo digo desde el cariño, que conste en acta, porque la historia del comic no sería la misma sin Superman, y si no existiera, habría que inventar uno, ¿verdad?
oiga cómo le cambiaron la fuente a la página web hasta ahora veo que eso se pueda