Los más ricos de Estados Unidos ganan en horas lo que los trabajadores normales logran en su vida. Ahora que la reforma fiscal de Trump pretende perpetuar el saqueo de los superricos, «desigualdad» ya no parece una palabra lo suficientemente fuerte.
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etiquetas: desigualdad , estados unidos , riqueza , pobreza
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Edito: La tienes duplicada un poco más abajo, se envió ayer