‘Puta’ ha estado cargada desde los orígenes del castellano de un sentido peyorativo. Y como para muestra vale un botón, la figura de la alcahueta por excelencia de nuestra literatura, la Celestina, no se nos presenta como un personaje digno de imitar. Incluso en una de las ediciones definitivas que tuvo la obra allá por 1502 ya se incluía en el título de la misma: Tragicomedia de Calisto y Melibea y de la puta vieja Celestina.
Comentarios
Putas somos todos/as, miento, si fuesemos putas al menos cobrariamos mas que estos sueldos de mierda.
DESENGAÑO DE LAS MUJERES
Puto es el hombre que de putas fía,
y puto el que sus gustos apetece;
puto es el estipendio que se ofrece
en pago de su puta compañía.
Puto es el gusto, y puta la alegría
que el rato putaril nos encarece;
y yo diré que es puto a quien parece
que no sois puta vos, señora mía.
Mas llámenme a mí puto enamorado,
si al cabo para puta no os dejare;
y como puto muera yo quemado
si de otras tales putas me pagare,
porque las putas graves son costosas,
y las putillas viles, afrentosas.
de puta madre! todo depende del contexto, no de la propia palabra
muy chulo y entretenido el articulo