El problema radica -según explicaron los propios padres- en que las ventanas no ajustan correctamente en los raíles, con lo que, al correrlas, es frecuente que se desencajen y caigan al patio o al interior de la propia clase, como ya ha ocurrido en más de una ocasión.
|
etiquetas: castellón , benicássim , educación , eso , bachillerato , ventanas