Hace 13 años | Por nieto16 a levante-emv.com
Publicado hace 13 años por nieto16 a levante-emv.com

Jurista y profesora de Sociología del Derecho en la Universidad Estatal de Milán. Experta internacional del uso de símbolos religiosos en el espacio público, Letizia Mancini (Bolonia, 1965) abrió ayer un seminario de la Universitat de València sobre multiculturalismo.

Comentarios

P

#3 Aún quedan Institutos Públicos con el crucifijo encima de la pizarra...sobra decir que yo lo quité, al menos durante mi hora...

D

#3 lee #4 y verás que los símbolos árabes pueden significar represión actualmente, yo no veo ni oigo noticias sobre bombas puestas por católicos o cristianos, en cambio mira por ejemplo lo que pasa cada vez más con: viñetas de mahoma, discotecas con nombres como la meca, secuestros por leyes que prohiben el burka, etc.
¿ocurre lo mismo cuando en la cabalgata del orgullo gay se disfrazan de obispos?

Todavía se siguen haciendo las ablaciones de clítoris y demás para que podamos pensar que todas las mujeres que llevan hijab lo hagan voluntariamente, sin temer acciones violentas por parte de sus familiares más próximos.

Con lo que nos ha costado llegar a la igualdad real entre sexos, sólo falta que se vaya todo al diablo aprovechando las libertades individuales de nuestra sociedad.

erbauer

#8 Esto...
#9 El punto medio está justo ahí, ni laicidad ni religiosidad absoluta. Libertad de culto personal y respeto a la pluralidad desde las instituciones.
#10 ¿Qué otras libertades? La religión es una libertad de expresión y el hecho de que una musulmana lleve el pañuelo o un cristiano el crucifijo no atenta contra las libertades de nadie. Como una carpeta de Britney Spears o una camiseta del Che Guevara.

Respecto a las normas de vestimenta, éstas han de estar justificadas. No es lo mismo pedir que las alumnas no enseñen el tanga que prohibirles llevar un crucifijo.

e

Laicismo total. Los alumnos tampoco deberías llevar signos religiosos. La religión tiene que estar fuera ¿o es que vamos a priorizar la religión por encima de otras libertades?
A #3 le parecerá muy evidente, pero realmente lo evidente es lo contrario. No puedes discriminar a los alumnos dependiendo si el objeto que llevan puesto es religioso o no. Si lo es se respeta pero si no lo es y está fuera de las normas de vestimente se castiga ¿por que hay que diferenciar?

waldeska

¿y crucecitas gamaditas?

gontxa

#1, depende si el que la lleva es europeo o asiático

oso_69

#2 Ahí está. Depende de su significado y representación.

w

La libertad religiosa de cada uno...que se quede en casa de cada uno.

Saludos

erbauer

#6 Mi religión o mi falta de ella es inherente a mi y va a dónde quiera que voy. Y toma representación en signos externos. A quien no le guste que no mire. No debe representarse en la institución escolar, pero los alumnos tienen libertad de culto y derecho sobre su propia imágen.

w

#7 AAAAAhmm... fijate que es curioso con toda la que se lio por el famoso velo en las chavalas musulmanas... no parecia nada que fuera libertad religiosa... claro como era un pañuelo y no un crucifijo.

Por lo demás allá cada uno, a mi no me molesta símbolo religioso /llamemosle X, eres libre de llevar lo que te de la gana, mientras no me molestes...pero tampoco podemos ser fanaticos del laicismo institucional y fanaticos de la religion personal... amos que el punto medio seria mejor

Saludos

D

El laicismo nace en las sociedades plenamente burguesas del siglo XVIII (léase Ilustración: Francia, Inglaterra, Alemania), que necesitan “ciudadanos” y no “fieles”. Históricamente la religión ha sido enemiga de la sociedad civil (no existen razones para que esa realidad cambie), porque ésta última salvaguardaba una serie de “igualdades” y “libertades” (más teóricas que reales, por lo demás) que imposibilitaban la “ciudad de Dios” de la que hablaba San Agustín. El auténtico ciudadano, el defensor de los espacios públicos (trabajo, educación, ocio), debería guardar las normas mínimas de laicismo: no portar símbolos religiosos, no realizar ostentación de sus creencias, sean las que sean, lo que no excluye que se pueda hablar del hecho religioso. Todo aquello que separe, limite, restrinja o particularice ha de guardarse para la intimidad. En mi opinión sólo debe manifestarse lo público o la discusión pública de algún asunto que atañe a la comunidad (las formas de manifestación del hecho religioso, por ejemplo).