Hace 12 años | Por rulf a elcomercio.es
Publicado hace 12 años por rulf a elcomercio.es

Un niño de dos años se zafó un momento de la vigilancia paterna, lo justo para introducirse en el cajero del banco que se encontraba a sus espaldas. La puerta se cerró, no se sabe muy bien si impulsada por él, por el viento o simplemente por su propio peso. Lo peor fue que el pestillo interior se accionó, dejando al niño atrapado en el interior.

Comentarios

conversador

¿Tan chico y ya quería "sacar dinero"? Qué mal está España

p

Le embargaron el niño. ¡Desalmados!

danic

Bueno es curiosa la historia pero fueron solo 40 minutos vamos

D

He visto muchos casos similares, en que el niño se escapa y queda atrapado en unas puertas giratorias, cae por unas escaleras mecánicas, se golpea contra las puertas de cristal, etc... Lo curioso es que siempre ha sido en Bancos, ¿será que los adultos nos ponemos muy nerviosos con el dinero y olvidamos nuestras responsabilidades paternas?. ¿O será que los niños en su inocencia, intentan huir del peligro que perciben que viene del dinero?.