La altura de hombres y mujeres condiciona el éxito reproductor de diferente manera. Las mujeres cuya altura está por debajo a la media son estadísticamente más propensas a tener mayor descendencia y el caso inverso sucede con los varones. Estas diferencias en la presión de selección sobre la altura en los distintos sexos en humanos significa que las familias bajitas tienen mayor éxito reproductor a través de la reproducción de sus hembras, mientras que las familias de talla normal se reproducen más a través de sus varones.
Comentarios
las familias bajitas tienen mayor éxito reproductor a través de la reproducción de sus hembras, mientras que las familias de talla normal se reproducen más a través de sus varones.
Todavía no he visto a nadie reproducirse a través de un varón...
Como odio se la excepcion que confirma la regla
Si eso fuese cierto, los masais ya se habrían extinguidos.
''Un caso interesante que se ha planteado es la mayor inteligencia de los judíos del este de Europa. Este grupo humano era relegado a ciertas funciones que requerían mayor destreza mental. Los más inteligentes alcanzaban mayor éxito económico y tenían más hijos que los demás. Esto permitió una selección sobre los más inteligentes.''
Como no nombra la raza blanca sino una etnia masacrada el siglo pasado, lo damos por valido.
Respecto al tema no se yo... hoy en dia se reproduce igual el que mide 1,80, 1,60, el feo, el guapo, el cojo y el malo. Lo que determina el numero de descendientes es su poder adquisitivo en el caso occidental.
Por cierto: http://www.abc.es/20121112/sociedad/abci-humanos-capacidades-intelectuales-201211121746.html#.UKFsVs0DCek
#1 Error: En países del tercer mundo los que mas se reproducen son los pobres, los ricos, en cambio, tienen muy pocos hijos.
#3 por eso termine la frase diciendo ''en el caso occidental'' en el tercer mundo se reproducen como conejos todos.
A nosotros nos gustan más bajas que nosotros, pero ellas los llaveros los quieren para llevar las llaves y no para salir con ellos. Eso ha pasao toda la vida de dios, vamos.