Crecen sin el cariño de sus padres. Unas veces arropados por familias de acogida y otras en centros de menores. Así es el destino para más de 30.000 niños que hoy están tutelados por las administraciones públicas. Una cifra elevada que pone en duda el funcionamiento del sistema de protección de menores. Más aún si se tiene en cuenta que miles de familias (unas 5.000) están deseando adoptar o acoger a uno de esos pequeños y se lo impide un complejo entramado legal.
Comentarios
#5 De todo hay. Yo conozco a un matrimonio que pudo elegir adoptar a una niña pequeña y opto por una de 8 años, con la añadidura de que tiene una enfermedad degenerativa (fibrosis quística). No solo han asumido el sacrificio que supone una hija con esa enfermedad, sino que están preparando la adopción de otra niña con similar enfermedad. Habría que hacerles un monumento.
#8, de todos modos, los procedimientos legales son necesarios aunque sean engorrosos y lentos. Tampoco se le puede entregar la custodia de un niño al primero que se presente en la oficina de adopciones o acogimiento.
#7 Por desgracia, tienes razón. La mayor parte de los que adoptan los quieren bebes, guapos, sanos, ...
Y pensar que con solo un poco de cariño serían felices estos niños.
En realidad hay miles de familias que quieren adoptar, y miles de niños que necesitan una familia, pero la correlación falla de forma brutal en un punto: entre los primeros sólo una ínfima minoría aceptaría adoptar a uno de los segundos, porque sólo aceptan adopciones de bebés o menores de tres años y sin necesidades especiales, algo que escasea bastante en el segundo grupo.
No es el "complejo entramado legal" lo que deja a esos niños sin padres, sino el deseo de los aspirantes a padres de tener un hijo que ellos hayan moldeado desde el primer instante, sea por miedo, prejuicios, o por lo que sea, y además sin 'taras'. Y así, grupos de hermanos que no deberían ser separados no llegan ni a oler una casa, niños que se quedan huérfanos de facto o de iure a partir de los 7 u 8 años ven que nadie quiere adoptarlos, niños con discapacidades o enfermedades de algún tipo, idem...
Luego está, como señala el artículo, el cupo de inadoptables, niños que están en manos de servicios sociales mientras a los padres se les obliga a hacer algún tipo de terapia/adaptación o salen de la cárcel, etc, que no pueden ser entregados en adopción porque ya tienen padres y se espera que estén pronto en condiciones de cuidarlos. En esos casos veo lógico que no se permita que el niño se encariñe con otra familia para ser separado posteriormente de ella.
#10, y a ser posibles blanquitos, que ésa es otra, la raza.
#6, no dudo que haya casos así, pero son los menos, para qué nos vamos a engañar.
Y que miles de ellas se lo plantearían si no pusieran esas mismas trabas legales
#4 y #5 Pero hablamos de adopción y de acogida y estoy de acuerdo en lo que mencionáis del primer caso, pero no en el segundo.
#9 Engorrosos, lentos necesarios, pero hay mucho retraso burrocrático.
Y no me he equivocado al escribirlo.
Eso no es del todo cierto. Independientemente de las trabas legales, la mayoría de parejas que quieren adoptar, quieren bebés o niños muy pequeños, menores de tres años o cosa así. Muy pocas familias quieren a niños ya creciditos o adolescentes.
Se me adelantó #4.
#11 No te creas, los "negritos" y las "chinitas" están en alza.
#4 Yo entiendo a esos padres que quieren un hijo lo más pequeño posible. Ya suele ser dificil el proceso de adaptación del pequeño como para que encima tengan "extras" como que al haberse criado salvaje no te respete porque "no eres su padre" o que no se sienta a gusto en la casa.
Que no quiere decir que no piense que es una putada, pero entiendo a los padres adoptivos que no quieran hijos demasiado mayores ni con "problemas".
Yo si me viera en la situación no sé qué haría. Supongo que me lo plantearía, pero necesitaría conocer al niño primero y ver cómo me llevo con él antes de decidir si quiero o no un hijo adoptivo más crecidito.
30.000 niños!! Ahora se engendran niñ@s como pañuelos de papel de usar y tirar, luego queremos que esos niñ@s tengan unos valores que en nuestra sociedad demandamos.