Durante años, quien esto escribe, mantuvo una postura durísima frente a los periodistas franceses que criminalizaban a los españoles con presuntos dopajes e historias para no dormir. Se vertieron toneladas de basura sobre Indurain y luego, sobre Contador. En ese momento, exigimos pruebas. Y hoy, desafortunadamente para nuestro deporte, resulta que Alberto no puede demostrar su inocencia en el asunto de la carne, algo que prueba su positivo.No es una cuestión de españolía, sino del cumplimiento de las normas.
Comentarios
Genial y muy acertado análisis, pero que, como no dice lo que queremos oír, pasará inadvertido por estos lares.
Muy bueno el artículo, merece la pena leerlo.
Inversión de la prueba.
Yo, que no se nada de ciclismo, lo que no me explico es como en la justicia deportiva prevalece lo contrario a lo que determina la jurisdicción ordinaria de cualquier estado de derecho, es decir que lo que se debe de probar es la culpabilidad y no la inocencia.
#2 No hay inversión de la prueba, el que escribe no tiene mucha idea de penal.
Ya hay una prueba que es el positivo por clembuterol, esa es la prueba y es definitiva, porque se hacen análisis y contranálisis.
Lo que no ha podido es buscar una explicación que le absolviera de culpa.
#4 Estás diciendo lo mismo, pero mal: no hay inversión de la prueba, hay inversión de la carga de prueba. Es decir, ya no es inocente hasta que se demuestre lo contrario, ahora es culpable a menos que pueda probar su inocencia, cosa que no ha podido hacer.
No estoy seguro de que el penal aplique dentro de la justicia deportiva, a todo esto.
#5 Digo que lo de "inversión de la prueba" no es correcto. Si acaso corrige al que lo ha dicho primero.
Y sí, una vez un tribunal te declara culpable y te sanciona eres culpable hasta, para, por, desde, segun si, so, sobre y tras lo que sea.
Luego puedes recurrir con algún argumento, prueba o error en el proceso, pero a ti ya te han declarado culpable.
Cualquier decisión de la "justicia deportiva" se puede recurrir a un tribunal ordinario, no están por encima de nadie.