PEKIN.- Poco antes de que arribe a Pekín el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, las autoridades chinas lanzaron fuertes críticas al discurso difundido ayer, en el que mandatario norteamericano le reprocha al país asiático su política de derechos humanos. Mediante un comunicado aseguraron estar "firmemente en contra" de toda intervención en sus asuntos internos. El vocero del Ministerio de Exteriores chino, Qin Gang, sostuvo que "los ciudadanos chinos tienen libertad de religión de acuerdo a la ley".
Comentarios
Y sin despeinarse...
Que lo diga un tipo que ha firmado y aún firma sentencias de muerte...
Aunque muchos le pueden calificar de hipócrita, ya me gustaría a mi que nuestro presidente tuviera la valentía de denunciar las violaciones de los derechos humanos que se dan en China.
#1 Estoy contigo, pero en realidad no creo que sea por valentía. Él sabe que su popularidad se ha desplomado y ahora debe estar probando cómo volver a parecer humano y preocupado por la vida de los demás.
Sí, yo lo califico de hipócrita.