Corría el año 1949, y a la alcaldía de Fort Lauderdale se le ocurriría elevar la imaginación y la felicidad de los niños a alturas inimaginables al presentarles un Santa Claus caído del cielo. Pero... salió mal. Al ser rescatado por los bomberos, perdería su barba y peluca, los niños quedarían horrorizados y en llanto y el hecho sería llamado por la prensa como “El Fiasco de Navidad”.
Comentarios
Menudo exitazo.
FAIL!
ahora habría que actualizar eso. No sé, enviar a los niños USA a guantánamo y que vean lo que son unas navidades recogidas