La Sección Tercera de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado al ex dirigente de ETA José Javier Arizcuren Ruiz, alias "Kantauri", a 30 años de prisión por ordenar el asesinato del abogado socialista Fernando Múgica, cometido el 6 de febrero de 1996 en San Sebastián por el entonces integrante del 'comando Donosti' Francisco Javier García Gaztelu, "Txapote". Una vez cumpla su pena, "Kantauri" no podrá volver a San Sebastián o al lugar donde resida la familia de Múgica por espacio de seis años.
Comentarios
Los terroristas estan cumpliendo con la ultima reforma las penas integras, si es que se la han podido aplicar por un delito del 96, a mi cumplir 30 me parece ya notablemente largo, para un adulto es casi no volver hasta la tercera edad.
Sobre los 6 de "destierro" teniendo en cuenta que son adicionales, pues ya esta bien, si dentro de 36 anitos, cuando ya no exista ETA el tipo quiere volver no creo que nadie le recuerde...
A veces creo que se banaliza lo que significa pasar 30 o 40 anos en la carcel... que antes pasaban 18 como mucho, pensad la diferencia para ver como esta el tema de duro.
#2, un negativo no es un pecado, es solo una opinion,no te lo tomes tan en serio como para esa comparacion...
#3 Sabes que no pasará 30 años en la cárcel, ¿verdad?
Creo que diciendo que son muchos tú banalizas dos cosas: un asesinato a sangre fría (por definición: con premeditación, alevosía,...) y lo que es encontrarte cara a cara con el asesino de la persona a la que querías.
No estaba comparando el negativo con eso, hombre: estaba aclarando lo dicho en #1, explicando por qué 6 años de alejamiento me parecen muy pocos. Estoy loco, pero no tanto como para poner esas dos cosas al mismo nivel
30 años, de los que cumplirá ¿cuántos? Se me hacen muy pocos.
Ahora, lo de que no pueda volver al lugar donde resida la familia del asesinado en 6 años clama al cielo: después ¿se puede mudar a la puerta de al lado? Eso si que debería ser de por vida. Bastante recuperar la libertad, pero encima provocar y tocar los cojones de esa manera...
Al que me ha puesto un negativo por lo que he dicho le dedico la siguiente reflexión: ojalá nunca te arrebaten a un ser querido violenta e injustamente. Pero si haces el esfuerzo de imaginártelo, piensa también en cómo sería cruzarte cada día, al ir a trabajar, con el autor de la infamia y saludar.