Habla de activismo utilizando formas artísticas para provocar, epatar, sorprender y forzar a la reflexión. Habla de sitios como 0100101110101101.org, que cuestionan la manipulación informativa; de The Yes Men, que utilizan la impostura para poner en evidencia a "los más peligrosos criminales del mundo"; de RTMark otros impostores que reemplazaban los productos originales con sus creaciones; de United We Stand, de Yomango, en una palabra, del "artivismo". Via http://librodenotas.com/
Copio y pego: (...) Todo esto se debate a cielo abierto en foros virtuales. Como parte de un discurso secundario que parece ser acompañante imprescindible de cada gesto u obra, las explicaciones y argumentaciones saturan la Web. Se discute desde el supuesto escenario privilegiado que sería Internet para la circulación democrática de información (en Argentina ya hay ocho millones de usuarios, avisa Microsoft) hasta los proyectos contra las leyes de propiedad intelectual y la impugnación de los derechos de autor. Estos últimos son cuestionados por colectivos de artistas en los cuales desaparece el nombre individual, evocando las vanguardias históricas que producían artículos sin firma, tras los pasos de la idea de muerte del autor del siglo XX (...)
El artículo me parece que es un colección de refritos tomados de aquí y de allá, metidos en una coctelera -ya lo leeré con más atención-. No así la noticia, ya que de este modo se puede comprobar, una vez más, como Antonios Burgos y Juanes Cuetos los hay en todas partes y como les da chincha y rabiña que "otros", aparte de los que escriben columnas en la prensa, y gracias a las nuevas tecnologías, puedan también opinar de lo que le de la gana y encima les lean.
Como se les acaba el chollo pues nada a disparar contra todo lo que se mueva.
Comentarios
Del Clarin:
Copio y pego: (...) Todo esto se debate a cielo abierto en foros virtuales. Como parte de un discurso secundario que parece ser acompañante imprescindible de cada gesto u obra, las explicaciones y argumentaciones saturan la Web. Se discute desde el supuesto escenario privilegiado que sería Internet para la circulación democrática de información (en Argentina ya hay ocho millones de usuarios, avisa Microsoft) hasta los proyectos contra las leyes de propiedad intelectual y la impugnación de los derechos de autor. Estos últimos son cuestionados por colectivos de artistas en los cuales desaparece el nombre individual, evocando las vanguardias históricas que producían artículos sin firma, tras los pasos de la idea de muerte del autor del siglo XX (...)
El artículo me parece que es un colección de refritos tomados de aquí y de allá, metidos en una coctelera -ya lo leeré con más atención-. No así la noticia, ya que de este modo se puede comprobar, una vez más, como Antonios Burgos y Juanes Cuetos los hay en todas partes y como les da chincha y rabiña que "otros", aparte de los que escriben columnas en la prensa, y gracias a las nuevas tecnologías, puedan también opinar de lo que le de la gana y encima les lean.
Como se les acaba el chollo pues nada a disparar contra todo lo que se mueva.