Si la semana pasada el CIS (aparato del Estado en manos del Gobierno de turno) publicaba unas previsiones con respecto a los resultados de las elecciones, este pasado domingo era el turno de varios periódicos que también se ponían a pronosticar diputados para unos y para otros basándose, como siempre, en el método científico de las llamadas telefónicas [...] De esta manera se influye en el electorado. Ofreciendo unha imagen victoriosa, para buscar el desánimo o para estimular o movilizar un sector mostrándole datos negativos para crear tensión.
Comentarios
No sé quien decía que existen verdades,mentiras y encuestas...
Eso es sexista, hay que decir la encuesta y el encuesto, como que un solo género.