En una catedral, en efecto. En la de Gap, en el sureste de Francia. Fue el propio obispo de la diócesis de Gap, monseñor Jean Michel di Falco, quien permitió la exhibición de la escultura en la iglesia, obra del conocido artista británico Paul Ryer. Di Falco es, además, el responsable del Consejo de la Comunicación de la Conferencia episcopal francesa. “Se trata de una obra que ciertamente no deja indiferentes", alega el prelado.
Comentarios
Aquí crucificarían probablemente al artista que intentara exponerlo. Es otra de las diferencias entre Francia y este país.
#3 Muy cierto, si esto pasa aquí se lia parda ...
WTF!!! Para mí que a algunos obispos se les van sus decisiones de las manos
La cruz ya la tenemos demasiado domada y no nos dice nada...