Una hembra de urogallo cantábrico, el ave emblemática en peligro de extinción, protagoniza un relevante enredo judicial. Una juez de León ha mandado al banquillo a un directivo de Enel-Endesa y le ha impuesto una fianza de un millón de euros para hacer frente a los daños a la especie si finalmente es condenado. El fiscal le acusa de haber ordenado abrir un parque eólico sin permiso a 500 metros de donde criaba la hembra, cuyos movimientos seguían por un transmisor científicos de la Universidad.
Comentarios
Estamos desesperados buscando una salida a nuestra propia supervivencia.
Deseamos suerte a las demás especies (aunque ya sabemos que su desdicha y la nuestra la hemos causado nosotros).
El método utilizado por la Junta para hace los parques eólicos ha sido fragmentarlos. Me explico, jamás un parque eólico se podría instalar donde se han instalado, los informes de impacto ambiental los hubieran tirado. Solución: no hacemos un parque eólico de 50 Mw, hacemos 50 parques eólicos de 1Mw. De esta manera muchos aerogeneradores se han instalado que de otra manera no hubiera sido posible.
como dicen en el artículo: "No estamos en contra de la eólica, pero queremos que se haga bien. Hay sitio de sobra en España sin ir a zona de cría de urogallo" y donde pone urogallo, se puede sustituír por otras muchas especies.
Un nuevo parque eólico que se instala en una zona protegida, un nuevo parque eólico con efectos sobre la fauna (ver la reducción de la Alondra Ricotí en Castilla y León http://www.heraldodesoria.es/index.php/mod.noticias/mem.detalle/idnoticia.47029/relcategoria.301/regini.10 y Castilla La Mancha), nuevo parque eólico en el que la Administración Autonómica de turno se "olvida" de estudiar el Informe de Impacto Ambiental y de impedir el parque por estar en zona de protección y ya van...
Parece que los jueces por fin se van dando cuenta de que no puede ser el libre albedrío de las administraciones autonómicas (ver las sentencias condenatorias a Galicia, Cantabria, Castilla y León, Catalunya, Castilla La Mancha...) y de las empresas eólicas, aunque lo que deberían de hacer es no permitir el parque, porque por mucha fianza que tengan, si desaparece el Urogallo de esa zona es prácticamente de forma definitiva.
Y lo peor de todo es que es la enésima cagada medioambiental de la Junta de Castilla y León en lo referente a protección medioambiental, en especial a zonas de protección de fauna, ya que las minas a cielo abierto de Laciana fueron llevadas ante la UE por permitirse en zonas de cría Urogallo y del Oso Pardo Cantábrico http://www.diariodeleon.es/noticias/noticia.asp?pkid=503213
y lo que queda todabía por destruir , somos como bulldocers destructores