El 2 de marzo de 1923 un periodista del Heraldo de Madrid, con motivo de la llegada de Albert Einstein, publica “Son los compañeros del sabio alemán, los que van a poder penetrar en la enjundia de sus explicaciones. La llegada de Einstein les saca por un instante de su labor oscura y apartada y lanza a la publicidad sus nombres y sus trazas. Se llaman Cabrera, Carrasco, Plans... Son los hombres que mantienen entre nosotros la lamparita de la investigación matemática”.
Comentarios
Es para tapar las vergüenzas del propio estado. Igual que cuando la iglesia pide perdón por alguna barbaridad cometida contra la razón hace ya demasiados siglos. No le honra hacerlo, le desonra no haberlo hecho mucho antes.
#2 Más vale tarde que nunca.
Qué bien que dejen por fin las drogas y que el estado se encargue de su gente