Llevaba luchando tres años contra una grave enfermedad por la que se le reconocía una minusvalía. Junto a su esposa, también minusválida, y sus seis hijos no podían hacer frente a los pagos de la hipoteca contraída con el Banco Popular para adquirir la vivienda. En la mañana del día 20, M.C.P. recibía una carta desde la entidad bancaria donde le pedían que en el plazo de dos días abonase 163.000 euros.
|
etiquetas: chiclana , hipoteca , pah , desahucio , suicidio