Confiscado en tiempos soviéticos, se inauguró en Kazán, la capital de Tatarstán (Tartaria), a 750 kilómetros al este de Moscú, la iglesia de la Exaltación de la Santa Cruz. El párroco católico, padre Diógenes Urkiza, explicó a AIN que se trata de “un caso único de restablecimiento de la justicia” y de un “milagro” que él y sus creyentes atribuyen a la Madre de Dios de Kazán.
Seguramente el Vaticano podría tomar nota y regresar a las comunidades a las que arrebató a lo largo de su imperio sus templos anteriores para construir sobre sus ruínas sus iglesias y catedrales.
Comentarios
#1 Amén!
#2 ...FAIL:
Es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar...
Creo que es un bien ejemplo por parte de Rusia.
Seguramente el Vaticano podría tomar nota y regresar a las comunidades a las que arrebató a lo largo de su imperio sus templos anteriores para construir sobre sus ruínas sus iglesias y catedrales.
Es justo y es necesario, creo yo.
#3 ... para sentirnos libres, al fin.