Durante la mayor parte de su vida, Mary McCarthy, vivió con un dolor en el lado derecho de su nariz, una molestia constante a la que se terminó acostumbrando. Pero el año pasado, después de una prueba PCR de COVID-19 extremadamente dolorosa, esa molestia se volvió algo insoportable hasta el punto de enfermarse. Tras acudir a varios médicos, el cirujano del Hospital Christchurch extrajo una pieza amarilla de tiddlywinks, un juego de mesa infantil muy popular en el país, 37 años después de que se le hubiera alojado en la nariz cuando era niña.
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