Stephanie Lighten, de 26 años y residente en Pittsfield (Massachusetts, EE.UU.) ha sido detenida por querer inocular a su esposa Jennifer, de 33 años, el esperma de su hermano para así poder tener un hijo. No, no creáis que las autoridades de Pittsfield son tan retrógradas como para negar a un matrimonio de lesbianas su derecho a tener un hijo. Lo que pasó es que Stephanie intentó inyectar el semen de su hermano con una jeringuilla reglamentaria, eso sí, pero sobre el sofá y por la fuerza.
Comentarios
Viendo como las gasta, prefiero no saber cómo consiguió el esperma del hermano.
El Diario de Patricia llamándolas en 3, 2, 1...