Hace 14 años | Por --74531-- a dailymail.co.uk
Publicado hace 14 años por --74531-- a dailymail.co.uk

Roberto Carrillo, un recluso del penal de Valle Hermoso (Mexico) pensó que durante la celebración del año nuevo podría escapar sin ser detectado usando un agujero que había sobre los barrotes, lamentablemente no calculó que el agujero era demasiado pequeño y tuvo que ser rescatado con una cortadora de metal por los carcajeantes guardias. "Si tuviera cerebro se sentiría muy avergonzado" dijeron los guardias.