"El eminente teólogo doctor Thaddeus soñó que estaba muerto y se dirigía al cielo. Sus estudios le habían preparado y no tuvo ninguna dificultad para encontrar el camino. Llamó a la puerta del cielo y se encontró con un escrutinio más meticuloso de lo que esperaba..."
# 10 No estoy tan seguro que las intenciones del autor del cuento sea "cambiar la manera de pensar de alguien que tiene fé en algo". De ser así, me parecería una falta de respeto imperdonable. Pienso más bien que el cuento está encaminado a hacer reflexionar al hombr@ (religioso, agnóstico ó ateo) de que hay "misterios" que escapan a su capacidad de comprensión, por lo que no tiene mucho sentido que creamos ser el centro del universo. Pienso también que el teólogo es una representación de la humanidad, tal vez por ser alguien con convicciones profundas basadas en la "no razón".
Jó, vaya rollo me acabo de tirar. Pero lo dejo tal cual. Si cuela, cuela,
#13 El autor, Bertrand Russell, aparte de ser una de las mentes más brillantes del siglo XX, fue un declarado ateo, racionalista y sarcástico:
El objeto del cuento no es cambiar la manera de pensar de nadie sino burlarse de lo irracional de todas las religiones, de su estrechez de miras y de su pequeñez. En esta mota de polvo infinitesimal que es la Tierra conviven decenas de religiones, todas creyéndose el ombligo del universo y poseedoras de la verdad absoluta.
Un libro muy recomendable del autor es "¿Por qué no soy cristiano?". En él fija el origen de los credos en el miedo irracional y cuestiona las contribuciones a la ética de las religiones.
Un creyente tras leer este cuento contestaría que, a pesar de la enormidad del universo, para dios él es lo más importante y viceversa. Esa es la base (y la grandeza para ellos) de su fé. Es como si hablaramos de una madre y su hijo, a pesar de que hay millones y millones de personas en el mundo y muchísimas de ellas son más guapas, más inteligentes, más ricas, más poderosas, más importantes,para esa madre lo más y lo único importante es su hijo, aunque sea una persona pequeñita e insignificante comparada con las otras.
Yo no soy creyente, pero reconozco que utilizar la razón para cambiar la manera de pensar de alguien que tiene fé en algo, no tiene sentido. La fé se tiene y ya está.
Comentarios
#6 No soporto las webs con fondo negro sobre texto blanco, casi me quedo ciego
#2: Capullo (no cuenta como insulto porque no soy de españa :P)
Ese cuento ya aparece dentro del enlace de Asnos estúpidos, un cuento de Isaac Asimov
Asnos estúpidos, un cuento de Isaac Asimov
kirai.bitacoras.com#5: ¿Qué tienes que decirme?
Son todos ciegos... no es texto blanco!!
La meneo por amiguismo, y porque conozco al dueño del blog
¿Y? No es el mismo enlace, nisiquiera sale en los comentarios de menéame, sino en los del blog...
#4, díselo al tipo de los comentarios 1 y 3
#13, pues déjalo, yo opino igual
#16 Lo mismo que yo quería decir, pero mejor explicado Gracias por el dato del libro.
# 10 No estoy tan seguro que las intenciones del autor del cuento sea "cambiar la manera de pensar de alguien que tiene fé en algo". De ser así, me parecería una falta de respeto imperdonable. Pienso más bien que el cuento está encaminado a hacer reflexionar al hombr@ (religioso, agnóstico ó ateo) de que hay "misterios" que escapan a su capacidad de comprensión, por lo que no tiene mucho sentido que creamos ser el centro del universo. Pienso también que el teólogo es una representación de la humanidad, tal vez por ser alguien con convicciones profundas basadas en la "no razón".
Jó, vaya rollo me acabo de tirar. Pero lo dejo tal cual. Si cuela, cuela,
La pesadilla está genial.
Este cuento esta en lo cierto... el hombre es una plaga.
Dios
#13 El autor, Bertrand Russell, aparte de ser una de las mentes más brillantes del siglo XX, fue un declarado ateo, racionalista y sarcástico:
El objeto del cuento no es cambiar la manera de pensar de nadie sino burlarse de lo irracional de todas las religiones, de su estrechez de miras y de su pequeñez. En esta mota de polvo infinitesimal que es la Tierra conviven decenas de religiones, todas creyéndose el ombligo del universo y poseedoras de la verdad absoluta.
Un libro muy recomendable del autor es "¿Por qué no soy cristiano?". En él fija el origen de los credos en el miedo irracional y cuestiona las contribuciones a la ética de las religiones.
Q cuento más malo.
No soporto las webs con fondo negro texto blanco... arghhh. Me marean.
Un creyente tras leer este cuento contestaría que, a pesar de la enormidad del universo, para dios él es lo más importante y viceversa. Esa es la base (y la grandeza para ellos) de su fé. Es como si hablaramos de una madre y su hijo, a pesar de que hay millones y millones de personas en el mundo y muchísimas de ellas son más guapas, más inteligentes, más ricas, más poderosas, más importantes,para esa madre lo más y lo único importante es su hijo, aunque sea una persona pequeñita e insignificante comparada con las otras.
Yo no soy creyente, pero reconozco que utilizar la razón para cambiar la manera de pensar de alguien que tiene fé en algo, no tiene sentido. La fé se tiene y ya está.
El relato, entretenido, pero inutil.
asi de pequeños e insignificantes seremos...