Hace 15 años | Por Tanatos a elperiodico.com
Publicado hace 15 años por Tanatos a elperiodico.com

Imaginemos que en una sala de Barcelona un grupo realiza pruebas de sonido. Son las seis de la tarde. Su actuación empezará a las diez de la noche. Llega un hombre y se identifica como “de la SGAE”. Trae el formulario para que el grupo ponga los títulos de las canciones que tocará esa noche en el concierto y los autores de las mismas. En lo que respecta a la música en directo, es el documento que legitima todo el sistema recaudador de esta entidad de gestión colectiva. +info en comentarios

Comentarios

Tanatos

(c&p] El hombre de la SGAE pide que le rellenen el formulario, ya sea alguien del grupo o alguien en nombre del ídem. Da igual quién lo haga, pues nadie estará controlándolo. Nadie. Puede hacerse encima de la barra, si no está mojada o sucia, o dentro del camerino, si hay por allí alguna mesa. O en el lavabo, si dispone de más luz y sitio para escribir. Así que cualquier mano –un músico del grupo, el conductor de la furgoneta, un comercial de la discográfica, personal del local-- escribe en ese papel el título de 10, 12 o 15 canciones de la banda durante la prueba de sonido. Que estén registradas en la SGAE, claro, para después pillar algo. O, directamente y para hacerlo más fácil, como suele ser práctica habitual, esa mano copia de un tirón los temas del último disco que haya publicado el grupo. Suele haber copias por la zona del merchandising.

¿Qué pasará si después, por la noche, ese grupo toca 14 versiones, pongamos que la mitad de Joaquín Sabina, y la otra, de Joan Manuel Serrat? ¿El hombre de la SGAE descubrirá esa irregularidad e impedirá que los autores que aparecen en el formulario –el grupo, para entendernos-- reciban algún céntimo por ese concierto en calidad de autores? En absoluto, ¡cómo lo va a descubrir y cómo lo va a impedir si se ha ido a las seis y pico de la tarde de la sala para no aparecer ya más ese día! ¿Y cobrarán Sabina o Serrat algún céntimo por esas versiones suyas que han tocado esa noche? No van nada escasos de dinero, es cierto, pero no verán ni una perra gorda por ellas.

D

El artículo da la falsa impresión que si en dicho formulario pones los nombres de tus canciones registradas en la SGAE entonces no tienes que pagar. Craso Error.

Tienes que pagar a la SGAE incluso por tocar tus propias canciones.
Si os registráis en la SGAE estaréis atados por contrato durante tres años y todas las canciones que hasta entonces compusierais o compongáis durante ese periodo de 3 años pasarán automáticamente a su gestión. Tendréis que pagarles para hacer un concierto, para sacar vuestro disco, para publicar vuestras canciones por internet, para prácticamente todo como si esas obras no fueran vuestras.

El contrato además se renueva solo por otros tres años. Y si durante el segundo año no decidís "desapuntaros", entonces automáticamente estaréis atrapados por otros tres.

¿La solución? No hacerse de la SGAE.
Solo cuando todos los artistas de España comprendan esta realidad podremos deshacernos de esta entidad.

Monesvol

Sería muy interesante que el grupo, cuando el público pide los bises, dijera que no pueden complacerles por que la SGAE ha venido y han decalrado unas canciones y no pueden tocar mas.

Así la gente conocería un poco mas de este entramado.