Publicado hace 17 años por mezvan a historias-de-la-ciencia.blocat.com

Artículo dedicado a aquellos que lo abandonaron todo por ayudar a los demás. Y no aquellos que dicen buscar la paz del mundo desde la comodidad y seguridad de sus grandes oficinas y guardaespaldas; sino de los que lo abandonaron todo, fueron a los campos de batalla y se mancharon las manos de sangre curando, consolando y luchando por las personas heridas a cambio de nada como por ejemplo Florence Nightingale.