La austeridad llegará este año en Orihuela también a la procesión del Domingo de Ramos y los recortes tocarán de pleno al obispo de Orihuela-Alicante, Rafael Palmero, quien cada año escoge la ciudad para celebrar el inicio de la Semana Santa y que en esta ocasión, por decisión expresa de la Concejalía de Protocolo, no recibirá una palma trenzada de 450 euros como el año anterior, sino una lisa exactamente igual a la de los demás miembros de la corporación y del cabildo y que costará diez euros.
Comentarios
una idea, y por que no pasa de regalar directamente, y si a alguien no le gusta que se la regale el....
¿Qué tal una palmadita en el hombro y ya está?
Oriola escenifica la sumisión del poder político al eclesiastico, con un toque de austeridad.
Un aplauso y le dejamos que se vaya...
Creo que llevan años timando 450 euros.