Bahréin y Yemen, como otros países árabes, se apresuraron a expresar su apoyo a la voluntad de los egipcios tras echar del poder a Mubarak. Sin embargo, esas declaraciones de simpatía apenas esconden la preocupación de los dirigentes por el riesgo de contagio de las revueltas entre sus poblaciones. El partido gubernamental yemení movilizó a sus simpatizantes para neutralizar una manifestación de protesta de la oposición. El rey de Bahréin anunció una ayuda cercana a los 2.000 euros para cada familia bahreiní.
Comentarios
aprendamos de ellos.. y salgamos contra esta gentuza de gobernantes.
Pues que se preparen que la próxima es la Ateista!!! ABAJO TODAS LAS RELIGIONES DEL MUNDO!
con el coran, que en el coran esta la respuesta